Waze es una de las aplicaciones más completas de navegación
Seguridad vial
Así busca acabar la DGT con Waze y Google Maps
Estas aplicaciones, que ofrecen alertas sobre el punto exacto donde se ubican los radares durante una ruta, también avisan de la presencia de un control
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha iniciado una lucha frontal contra aplicaciones y grupos de redes sociales que avisen de los controles de las fuerzas de seguridad, de los radares de velocidad y de los elementos de vigilancia de la carretera. De hecho, desde Tráfico están buscando la forma de prohibir las alertas de controles de velocidad, dado que, según afirman, «suponen un grave peligro para la seguridad vial».
En este sentido, los jóvenes de 18 a 25 años son el segmento de conductores que menos infracciones registran, debido tanto a las advertencias de los radares como a su capacidad para eludir el control policial. Este dato refleja, según la DGT, que no se trata de una mayor concienciación al volante, sino de la influencia de los radares y los controles policiales.
Aplicaciones como Waze o Google Maps proporcionan información en tiempo real sobre el tráfico de las ciudades, los accidentes y las señales de los radares de velocidad. Por este motivo, aunque no existe una normativa específica que prohíba el uso de dispositivos portátiles, la DGT está ultimando un proyecto de ley que podría sancionar su uso.
Del mismo modo, una de las claves podría radicar en la ley de seguridad ciudadana, que tipifica como delito anunciar la posición de los agentes de la autoridad, una práctica habitual en los grupos de WhatsApp y Telegram donde se indica el lugar exacto.
El papel de la tecnología en la carretera
Con el fin de acabar con este 'problema', el organismo ha decidido utilizar vehículos patrulla para realizar despliegues de unos 15 minutos en puntos conflictivos de las carreteras españolas. Estos serán tan rápidos que los usuarios apenas tendrán margen de reacción para notificarlo, y las aplicaciones de navegación no podrán lanzar las alertas a tiempo.
Concretamente, se trata de una medida temporal mientras la DGT estudia otras vías para prohibir las alertas de radares y controles policiales. El organismo está decidido a reducir su radio de acción, por lo que actualmente está abierto un debate sobre el papel de la tecnología en el marco de la seguridad vial.
