Medio minuto con Biden como metáfora
Los tres pecados de Zapatero fueron gestionar fatal la crisis económica, proyectar una pésima imagen de España en el exterior y, lo que es peor, enfrentar a los españoles entre sí a cuenta de la memoria histórica. ¿Les suena? Sánchez es el alumno aventajado. No en vano le hicieron la tesis doctoral los hombres del zapaterista Miguel Sebastián. Volvemos a las andadas, por los mismos caminos errados de entonces. Hoy quiero detenerme en nuestro protagonismo internacional, que ha bajado considerablemente. Fíjense: España pesa muy poco en la UE. Con ningún otro Gobierno tuvimos tan poca presencia en Europa. Con Marruecos, que es asignatura de primero de Asuntos Exteriores, nos va fatal. Ningún presidente, desde Arias Navarro hasta nuestros días, manejó peor la relación con un vecino tan estratégico para nuestros intereses. En Hispanoamérica estamos ausentes. La gran empresa de España, que fue siempre aquella área del mundo, está totalmente desatendida. Lo dicho, ausentes. Y, por si fuera poco, los veinticinco segundos con Biden son toda la síntesis de un Gobierno instalado en la impostura y la ineficacia. Pocas vergüenzas mayores que aquel medio minuto escaso, en que el imperturbable Biden caminaba sin prestar atención al inquilino de la Moncloa. Pocas síntesis más ácidas y más elocuentes. Esa es la política exterior de un país como España. Se puede resumir en un sencillo Astrolabio.