El miedo de ERC a los desfiles

A una parte de la izquierda de este país la música militar nunca le supo levantar, pero España, nuestra nación, la más antigua de Europa como tal, cuyas Fuerzas Armadas son de las más modernas y competentes del mundo, cuenta además con una industria de la Defensa tan eficiente y prestigiosa como desconocida entre la ciudadanía. Son esas Fuerzas Armadas las que tienen que asegurar y defender la integridad territorial de España, tal y como se lo encomienda la Constitución en su artículo octavo. Una institución, por otro lado, valorada de manera extraordinaria por la mayoría de los españoles, que ayer rindieron su homenaje a nuestros ejércitos, por cierto, cada día con más entusiasmo. Ayer miles de personas llenaban las calles de Madrid para poder presenciar el desfile militar. ¡Ah, pero resulta que a los republicanos catalanes, a los golpistas, les debe de dar miedo los desfiles, pues los quieren anular! Conociendo a Sánchez, hasta es posible.

Ya en su día el ocupante de la Moncloa propuso en una entrevista, cuando estaba en la oposición, suprimir el Ministerio de Defensa, lo que demostró su enciclopédica incultura política. Fíjense en la situación actual: guerra en Ucrania, a tres horas de avión de España. Guerra, y para largo, con consecuencias imprevisibles, en Israel. Nuestro vecino del sur, a apenas 14 kilómetros de nosotros, ese que ahora tiene abducido a Sánchez –y sabe Dios por qué–, Marruecos, armándose con misiles que pueden llegar a cualquier lugar de España. El mundo en general, pero África muy especialmente, inmerso en una inestabilidad creciente... y Sánchez propone suprimir el Ministerio de Defensa; y Esquerra, los desfiles.

Nada noble hay en la guerra. Yo no la quiero y pertenezco a una generación de españoles que nunca se vio inmersa en ningún conflicto bélico, pero sé que la Historia de la humanidad es una historia de guerras y el hombre, que es un lobo para el hombre, ha vuelto a su peor versión; por tanto, si quieres la paz, prepara la guerra, como sentenciaron los romanos. Qué menos que la ciudadanía pueda ver a los garantes de la democracia, la libertad y la integridad física de tu patria, desfilar. No tengas miedo, Rufián, que desde Jaén también entienden y disfrutan de la música militar. No temas, tranquiliza también a Oriol, no hará falta llegar al artículo 8 de la Constitución, por más empeño que vosotros pongáis.

Nota final: en el desfile de la Hispanidad estaban todos los presidentes de las autonomías gobernadas por el PP y el PSOE. Solo faltaron los muy españoles Urkullu y Aragonés, es decir, los verdaderos socios de Sánchez. No haré más preguntas, señoría.