Los extrapunitivos

Hay una tipología de conductas que se denominan extrapunitivas, que consisten en echar la culpa a los demás de aquello que ha salido mal, aunque ellos fueran sus dirigentes. Es como si, un suponer, un equipo de fútbol pierde una final y el entrenador proclama a los cuatro vientos que la derrota se ha debido a lo mal que ha jugado la defensa y lo fallona que ha estado la delantera. Pero él no tiene nada que ver porque estaba en el banquillo.

Viene esto a cuento del comportamiento pueril, indecente, que los líderes nacionales de los partidos socialista y comunista han hecho con los cabezas de lista de sus formaciones en Andalucía. ¿Cómo será la moral a estas horas de los Espadas y Nietos abandonados por Pedro Sánchez y Yolanda Díaz con sus «yo no he sido»? ¿Y cómo estarán de preocupados el resto de los barones que en mayo próximo tendrán un encuentro con las urnas? Es fácil de adivinar. Al menos, los líderes andaluces derrotados han tenido la gentileza política de felicitar al ganador, cosa que ni el presidente del Gobierno y ningún miembro de su «equipazo» de ministros han hecho. Ello da idea del tamaño monumental de sus rabietas.