Cartas al director
De la democracia a la autocracia
Nuestra democracia camina velozmente hacia la autocracia de la mano de Sánchez. Su cesarismo galopante está deteriorando nuestros valores democráticos y poniendo en evidencia a nuestro sistema político. Este Gobierno no está a la altura de nuestro entorno democrático. Los ciudadanos no entienden la retórica y la demagogia empleada para eludir sus responsabilidades. La defensa a ultranza de Griñán no es un referente ejemplar de calidad democrática. Apelan a la honradez personal, pero la honradez personal no puede justificar la ilegalidad, ni expiar los desmanes cometidos. Defender su inocencia aduciendo que no se ha enriquecido, es una falacia, porque Griñán ha sido condenado no por haberse enriquecido, sino por prevaricación y malversación de caudales públicos. Robar dinero es un delito incluido en el Código Penal, pero utilizar una institución para comprar votos con el dinero de los parados es mucho más grave, ya que privan a los ciudadanos el derecho a elegir libremente a sus representantes.
El presidente del Gobierno concederá el indulto a Griñán, pasándose por el arco de triunfo el Código Ético del PSOE que prohíbe «proponer y apoyar el indulto de cargos público condenados por delitos ligados a corrupción».
Sánchez, que llamó públicamente indecente a Rajoy, que ni siquiera estuvo procesado, justifica la corrupción de Griñán, que ha sido condenado a seis años de prisión. ¿Quién es el indecente?
Si Sánchez sigue en el poder nuestra democracia seguirá agonizando bajo el narcisismo patológico del Zar.