Cartas al director
El estado mental de los gobernantes
Si para conducir un coche te exigen pasar un examen psicotécnico, además de tener el permiso de conducción, para conducir cualquier Estado las leyes debieran ser mucho más exigentes toda vez que son muchos los ciudadanos que dependerán de sus decisiones. El ejemplo de Biden-Trump para liderar Estados Unidos es de una claridad manifiesta y es el país que lidera al mundo. Pero si tenemos claro que los gobernantes deben estar rodeados de saberes sobrados para el cargo, no menos equilibrado ha de ser su cerebro, porque estamos acostumbrados a comprobar cómo las filias, fobias e intereses particulares priman sobre la prudencia y la preeminencia en su gobierno del interés general.
Es por ello que en los regímenes democráticos se deben tomar en consideración el estado mental de los aspirantes a jefes de gobierno, porque más vale prevenir que curar .Y asimismo la legislación debe ampliarse a contemplar los desequilibrios mentales sobrevenidos, porque puede ser que algún cuerdo pierda el oremus por la tormenta de la política.