El padre de Ernesto Borges, con el galardón
Cuba
Ernesto Borges, Premio Patmos a la Libertad Religiosa en Cuba
El ex oficial de contrainteligencia cumple una condena de 30 años de cárcel, lugar donde abrazó la fe católica en 2005
El ex oficial de contrainteligencia Ernesto Borges Pérez, encarcelado desde 1998, ha sido galardonado con Premio Patmos de Libertad Religiosa, según ha podido saber El Debate.
Borges, de 55 años de edad, fue condenado a 30 años de cárcel por presunto espionaje en grado de tentativa en un juicio carente de garantías procesales.
En el momento de su detención prestaba sus servicios en la unidad donde se forman a los agentes destinados a ser infiltrados en Estados Unidos.
El régimen castrista le acusó de disponerse a filtrar información sensible la Oficina de Intereses Estadounidenses en La Habana, máxima representación de Washington en Cuba desde 1961 hasta 2014, año en que se restablecieron las relaciones diplomáticas.
Según algunos medios opositores como 'Adn Cuba', la Seguridad del Estado ha intentado en una docena de ocasiones reclutar a Borges a cambio de su libertad, pero siempre se ha negado. La respuesta ha sido no concederle ninguna reducción de pena.
El único beneficio que hasta ahora ha obtenido ha consistido en breves visitas a su domicilio, una de ellas en octubre de 2020. Dentro de la cárcel, le fue paulatinamente suavizado el régimen hasta el pasado 7 de julio, cuando las autoridades le acusaron de realizar una llamada a su casa para informar de la existencia de casos de Covid-19 en su bloque de detención.
El mayor cambio a nivel personal de Borges en estos largos años de privación de libertad fue su conversión al catolicismo, acaecida en 2005.
Como indica a este diario el pastor bautista Mario Félix Lleonart Barroso, coordinador general del Instituto Patmos y que pudo visitar a Borges en la cárcel hace siete años, el ex oficial «cumple el requisito fundamental del Premio: ser consecuente con su fe». Lleonart admite que, a raíz de las revueltas de julio de 2021 en Cuba, cuya consiguiente represión se ensañó de modo especial con representantes religiosos (el padre Castor Álvarez, el laico Ángel Mesa o el pastor Lázaro Rosales, por citar algunos nombres), existió la tentación de vincular el premio de este año con el histórico acontecimiento del verano. Pero que una de las razones que ha inclinado la balanza a favor de Borges ha sido que su caso no pierda visibilidad, «por muy humilde que sea nuestro premio». La placa le fue entregada clandestinamente al padre de Borges hace unos días.
