Renuncia
El Papa acepta la renuncia del arzobispo de París por un presunto caso de trato «ambiguo» con una mujer
Francisco acepta la petición emitida por el propio Michel Aupetit por un supuesto «comportamiento ambiguo» con una mujer en el año 2012
Antes de iniciar su viaje a Chipre y Grecia, Francisco dejó resuelto uno de los asuntos controvertidos de la Iglesia francesa. El arzobispo Michel Aupetit deja de ser el prelado oficial de Paris tras la aceptación por parte del Santo Padre de su renuncia, precipitada, en buena parte, por la información publicada hace unos días por el diario Le Figaro y Le Point, donde Aupetit podría haber mantenido un «comportamiento ambiguo» con una mujer en el año 2012.
El escándalo saltó cuando Le Point publicaba un correo electrónico de 2012 del ex secretario personal de Aupetit cuando era vicario general de París, en el que se citaba textualmente un romance «consentido» con una mujer «adulta» de la que nadie sabe su nombre hasta el momento. El hasta hoy arzobispo de Paris ha «rechazado completamente» que hubiera tenido con ella relaciones sexuales, después de que el semanario francés vertiera estas informaciones sobre su vida.
«El Santo Padre ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la Archidiócesis Metropolitana de París (Francia) presentada por monseñor Michel Aupetit», ha anunciado el Vaticano en un escueto comunicado. El Papa ha designado a Georges Pontier como Administrador Apostólico de la sede vacante de la misma Archidiócesis.
«El Señor ha dado, el Señor ha retirado»
«El Señor ha dado, el Señor ha retirado. ¡Bendito sea el Nombre del Señor!», con esta frase del libro de Job, el hasta ahora arzobispo de Paris ha iniciado su comunicado en el que anunciaba que el Papa Francisco había aceptado su paso al lado. «Los dolorosos acontecimientos de la semana pasada me habían llevado a poner mi misión en manos del Papa para preservar a la diócesis de la división que siempre suscita sospechas y desconfianza». El arzobispo, médico también de profesión, ha declarado que el revuelo generado con la noticia ha sido algo «perturbador» y ha confesado que «ora por aquellos» que le desearon mal. A su vez, Aupetit ha pedido «perdón a quienes pude haber lastimado y les aseguro toda mi profunda amistad y mis oraciones, que siempre serán suyas».
Tras hacer balance de su gestión, donde considera que la archidiócesis tiene una hoja de ruta «profundamente dinámica» y en el camino de la «sinodalidad» a la que Francisco ha invitado a todo el Pueblo de Dios, el hasta ahora arzobispo de Paris ha vuelto a repetir puedo repetir el mensaje de su primera homilía: «¡No mires al Arzobispo, mira a Cristo!».