La delegación indígena Metis llega a la plaza de San Pedro, encabezada por su presidenta, Cassidy Caron, para reunirse con el Papa Francisco como parte de una serie de encuentros que acontecerán esta semana, en el marco de un proceso de reconocimiento y de petición de perdón por parte de la Iglesia católica por los casos de abusos cometidos en internados por parte de miembros de la Iglesia.
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Hasta Roma ha llegado una delegación de 32 ancianos indígenas, custodios del conocimiento, sobrevivientes de escuelas residenciales y otros jóvenes activistas, según ha informado la Conferencia Episcopal canadiense que les acompaña.
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El objetivo es que el Pontífice escuche sus testimonios y transmitir la petición de perdón a estos pueblos, si bien, Benedicto XVI había transmitido este mensaje por lo sucedido en las residencias escolares establecidas por Canadá a finales del siglo XIX dedicadas a la población indígena y que estuvieron en funcionamiento hasta 1997.
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La delegación Metis ha atendido a la prensa tras su reunión con el Papa Francisco. El encuentro privado ha tenido una duración de más de una hora, más de lo que el Santo Padre suele dedicar a los gobernantes o presidentes a quienes recibe en audiencia privada.
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El presidente interino de la Asociación Fraser Valley Metis, Pixie Wells.
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Entre sus exigencias está la de que el Vaticano anule los documentos papales que hace más de 500 años facilitaron el dominio del imperio español.
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Miembros de la delegación Métis han entrado en la plaza de San Pedro tocando el violín, símbolo de su cultura e identidad.
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Cassidy Caron, la joven presidenta de los mestizos, habló, leyendo una declaración, sobre el «incalculable número de personas que nos han dejado sin que su verdad sea escuchada ni su dolor reconocido». Sin recibir nunca la humanidad básica y la curación que merecían». «El reconocimiento, la disculpa, llega con mucho retraso, pero nunca es tarde para hacer lo correcto», ha afirmado.
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En la biblioteca vaticana, el Santo Padre se ha reunido con las dos delegaciones en sucesivas audiencias. En esta imagen se puede ver a los representantes de la delegación del pueblo mestizo Métis, junto a sus acompañantes de la Conferencia Episcopal Canadiense y en el medio al Papa Francisco.
Vatican Media / AFP
La delegación del pueblo Inuit junto a Francisco y los miembros de la Conferencia Episcopal Canadiense tras su audiencia privada en el Vaticano. Esta serie de encuentros, que se alargarán por toda la semana culminarán el viernes con una audiencia común de las tres delegaciones en la que el Papa Francisco tendrá la oportunidad de dirigirse a todos ellos.
