Tiktokers de vuelta: por qué el cura francés con 1,2 millones de seguidores ha cedido su cuenta
El padre Matthieu Jasseron se ha «desenganchado» de todas sus redes sociales y las ha entregado a distintas asociaciones para que sigan evangelizando
En apenas tres años había alcanzado 1,2 millones de seguidores en TikTok, con más de 30 millones de Me gusta, lo que le había convertido en el sacerdote francés más popular de la red social. Y, de pronto, el padre Matthieu Jasseron ha decidido retirarse del foco público y ceder su cuenta a una organización. ¿Qué ha ocurrido?
Algunos usuarios de las redes sociales, especialmente los más jóvenes, casi preferirían perder una mano antes que su cuenta de TikTok o Instagram, más aún si tienen varios miles de seguidores. Por eso, que el sacerdote en habla francesa con más discípulos en las redes sociales haya decidido desconectarse, ha sacudido a su joven feligresía virtual.
El padre Matthieu Jasseron, párroco de Joigny, en la diócesis de Sens-Auxerre, se ordenó tarde, a los 34 años de edad, en 2009. Atrás dejaba una prometedora carrera de gestión de activos financieros para dedicarse a la gestión de almas. Sus sobresalientes capacidades de comunicación y su iniciativa le llevaron a las redes sociales, donde su perfil comenzó a subir como la espuma.
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Como tantos otros curas y monjas influencers, sus intervenciones no estuvieron, en ocasiones, exentas de polémica. En uno de sus vídeos más vistos, el sacerdote ponía en duda que los actos homosexuales fuesen pecado, y en otros, su sentido de la comedia puede haber rayado en lo grotesco.
Pese a ello, la heterogénea comunidad virtual del padre Jasseron encontraba en su perfil las respuestas a las grandes cuestiones que rodean los misterios de la vida, la muerte y cuestiones metafísicas en general. Eso le había hecho tan popular entre los jóvenes, y nadie podía negar la arrolladora capacidad comunicativa del sacerdote.
Pero, recientemente, el sacerdote subió un vídeo a TikTok que echaba por tierra todo su trabajo en las redes. En él, anunciaba que se retiraba porque quería dedicar su tiempo íntegramente a la parroquia. Y añadía otra razón, más de peso y seguramente más interesante: «El temor a que la presencia mediática a veces me halaga con un orgullo no siempre muy adecuado».
Vídeos breves y contundentes
El padre Jasseron quemaba así en la hoguera de las vanidades el deseo de popularidad y reconocimiento que casi siempre subyace en el uso y abuso de las redes sociales. Y tenía un acto de desprendimiento más: cedía su millonaria cuenta de TikTok a la asociación 1000 Raisons de Croire (1000 razones para creer), otra popular cuenta –aunque mucho más pequeña que la del sacerdote– especializada en apologética de una línea ortodoxa con el Magisterio de la Iglesia.
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El nuevo equipo de jóvenes misioneros virtuales que ha asumido la cuenta del sacerdote ex tiktoker tiene sobrada experiencia en el arte de los vídeos breves y contundentes. «Hacernos cargo de ella supone una bendición para nuestros esfuerzos de evangelización en línea», han explicado. «El objetivo es proporcionar a los jóvenes una formación y un conocimiento de la fe católica con nuestros vídeos», añaden. «Nuestro objetivo es producir contenidos que sean a la vez accesibles, didácticos y modernos, sin comprometer nunca la doctrina de la Iglesia en un intento de complacer al mundo», han asegurado.
No son los únicos agraciados: la plataforma Theostream, una suerte de «Netflix cristiano» creado por el sacerdote en 2023 y que pretende ser un agregador de contenido católico de calidad, se la ha entregado a la Comunidad Emmanuel, mientras que su cuenta de Instagram, con 65.000 seguidores, se la ha confiado a Lueurs, un podcast sostenido por la diócesis de París que promueve una sólida búsqueda espiritual.