El representante del Papa Francisco califica Medjugorje como «lugar de gracia»
El arzobispo Aldo Cavalli, visitador apostólico, no tiene por misión pronunciarse sobre las supuestas apariciones, sino mostrar la atención del Papa y la Iglesia por este lugar de peregrinación. «Es un lugar de conversión», asegura
El arzobispo Aldo Cavalli, «visitador apostólico con carácter especial», con nombramiento directo del pontífice, no juzga si la experiencia vivida por las personas que afirman haber recibido mensajes de la Virgen constituye un auténtico fenómeno sobrenatural. Él deja este discernimiento a la Santa Sede y, en última instancia, al Papa.
Ahora bien, a partir de la experiencia que está pudiendo vivir en este centro de peregrinaciones, desde que recibiera esta misión pontificia, en noviembre de 2021, anima a todo creyente a peregrinar hasta esas tierras.
«Es un lugar de oración, un lugar de conversión, un lugar de libertad personal para responder al Señor. Este es un lugar de contemplación», aclara el prelado italiano de 78 años.
Desde mayo de 2019, el Papa Francisco autorizó la organización de peregrinaciones oficiales de diócesis y parroquias a Medjugorje.
El misterio de Medjugorje
En declaraciones públicas, recogidas a través de diferentes fuentes recopiladas por El Debate, el representante papal se pregunta: «¿Por qué viene tanta gente aquí?». Y responde: «Hay un profundo porqué. No vienen por diversión o por otros motivos… Siempre he notado que vienen con el deseo de encontrarse con el Señor, orar y estar en compañía de la Virgen María».
El arzobispo Cavalli es posiblemente el nuncio apostólico con la carrera más prolongada en activo: ha sido directo representante de Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco en Angola, Chile, Colombia, Malta, Libia, y Países Bajos. Desde que ha llegado a esta parroquia, dirigida por frailes franciscanos, ha buscado promover paz y serenidad.
Su objetivo, declara abiertamente, consiste en colaborar con los frailes franciscanos de la parroquia, el obispo de Mostar y los laicos que aquí trabajan con un solo objetivo: que los peregrinos «encuentren al Señor».
Por este motivo, el visitador apostólico promueve los momentos y espacios que, según la tradición de la Iglesia, permiten el encuentro con Dios: la Eucaristía (la Misa y la adoración del Sacramento), el Evangelio, el sacramento de la Reconciliación, la caridad, y la compañía de la Virgen María.
«Necesitamos cooperar en eso, no en otra cosa. Colaborar con el Espíritu Santo para ayudar a los creyentes en esa dirección», asegura monseñor Cavalli.
«Me he dado cuenta de que las personas vienen de diferentes partes del mundo aquí a orar. Todas estas personas quedan envueltas en una gran gracia profunda, que toca el corazón de cada ser humano», ha reconocido en declaraciones emitidas por la Fundación Centro Medjugorje.
En definitiva, la misión recibida por el arzobispo Cavalli como visitador apostólico del Papa consiste en mostrar la atención y el discernimiento de la Iglesia universal ante el extraordinario fenómeno de las peregrinaciones que siguen llegando a este rincón de la península balcánica.
Según él mismo reveló en una entrevista a Radio Mir, cuando el Papa le encomendó esta misión le dijo: «Ve allí, quédate ahí y mantente tranquilo, tranquilo y equilibrado, quédate ahí y sigue a la gente. Y ya está».
Un fenómeno por aclarar
La serie de supuestas apariciones de la Virgen María comenzaron a registrarse el 24 de junio de 1981 en Medjugorje. Allí la Virgen María se habría aparecido diariamente a seis jóvenes croatas de Herzegovina, Ivan Dragičević, Ivanka Ivanković, Jakov Čolo, Marija Pavlović, Mirjana Dragičević y Vicka Ivanković quienes tenían entre diez y dieciséis años en el momento de la primera aparición.
En el año 2010, Benedicto XVI estableció una comisión internacional para estudiar las supuestas apariciones, encabezada por el cardenal Camillo Ruini, antiguo obispo vicario de la Diócesis de Roma.
La Comisión entregó un informe en 2014 al Papa Francisco que, a pesar de haberse filtrado en algunos elementos por la prensa, no se ha hecho público.
La próxima gran peregrinación que presidirá el arzobispo Cavalli en Medjugorge tendrá lugar con el anual Festival de Jóvenes, que se llevará a cabo del 26 al 30 de julio de 2023, donde se espera la participación de más de 50 mil personas.