José Ignacio Munilla
Munilla arremete contra la ideología LGTB: «Caerá porque no hace más que generar heridas»
En su programa Sexto Continente, que emite Radio María, Munilla ha reflexionado sobre la imposición de la bandera LGTB en todas las instituciones públicas, incluida la Casa Blanca
José Ignacio Munilla ha señalado que «la ideología LGTB tiene los pies de barro» al estar construida contra la naturaleza. Por eso, el obispo de Orihuela–Alicante ha augurado que: «obviamente va a caer», porque «no hace más que generar heridas».
En su programa Sexto Continente, que emite Radio María, Munilla ha reflexionado sobre la imposición de la bandera LGTB en todas las instituciones públicas.
Para dicha reflexión, el prelado se ha valido de las declaraciones del obispo texano Joseph Strickland contra el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, quien presumió haber izado la bandera LGTB en plena Casa Blanca.
El obispo norteamericano le replicó: «Me temo que está en lo cierto, señor presidente, pero, recuerde, el orgullo viene antes de la caída».
La inconsistencia del barro
Munilla ha glosado el comentario de Strickland con la afrimación: «Enorgullecerse del orgullo es muy poco inteligente, porque el orgullo viene antes de la caída y así sucedió también en la historia sagrada».
Posteriormente ha lamentado que el símbolo del arcoíris «se utiliza de una manera en la que pasa de ser signo de la alianza con Dios a ser signo del orgullo en el que el hombre se desvincula de Dios, de la ley natural, de la realidad».
De este modo, el arcoíris se trastoca «en una especie de torre de Babel que se eleva desafiante diciendo: yo tengo orgullo y tengo mi proyecto propio», señaló el obispo.
Tras afirmar que el arcoíris «es la imagen de la humanidad de Jesucristo», según los Padres de la Iglesia, recordó que la torre de Babel «cayó estrepitosamente porque todo aquello que se construye sobre barro no tiene consistencia».
Munilla señaló que «la ideología de género, la ideología LGTB tiene los pies de barro: está construida contra la propia naturaleza, contra el propio ser del hombre, contra esa diferencia de dualidad sexuada en la que Dios nos ha creado». Y concluyó augurando su caída: «Obviamente, va a caer. Es más, por mucho que se esté forzando políticamente su introducción a la fuerza; sin embargo, no hace más que generar personas más heridas».
