La historia de la Guardia Suiza Pontificia está ligada al día 6 de mayo, fecha en que cada año nuevos soldados acceden a este ejército –el más pequeño del mundo–. Ese día, pero en 1527, 147 uniformados en rojo, azul y amarillo fallecieron defendiendo al Papa Clemente VI durante el saqueo de Roma por parte de las tropas de Carlos V. No obstante, su fundación es anterior. En el siglo XVI, Julio II solicitó a los nobles suizos la cesión de 150 soldados para protegerle. En aquel entonces, estas tropas gozaban de una buena reputación, debida en parte a los enfrentamientos que hubo en las guerras de Borgoña.