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Los cinco Belenes más impactantes que se han expuesto en el Vaticano

Repasamos los Nacimientos expuestos en la Plaza de San Pedro que más han destacado en los últimos años, donde el arte de distintas partes del mundo rindió homenaje al misterio de la Natividad a través de diversas expresiones

María Rabell García
María Rabell GarcíaCorresponsal en Roma y El Vaticano

Actualizada 04:30

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Un Belén napolitano y siete Obras de Misericordia

El pesebre del Vaticano en 2017 impactó por su majestuosidad y simbolismo, con veinte figuras inspiradas en el icónico Belén napolitano, de tamaño mayor al natural, que, además de evocar el Nacimiento del Niño Jesús, incorporaban personajes que ilustraban las Siete Obras de Misericordia.

Lo curioso es que los visitantes podían intentar adivinar, en una gran área de 80 metros cuadrados, dónde se encontraban las obras de caridad, tales como visitar a los presos, dar de comer al hambriento o vestir al desnudo. Una poderosa invitación a la compasión y la generosidad. Donado por la Abadía Territorial de Montevergine, en el sur de Italia, y elaborado en terracota al estilo del siglo XVIII, este pesebre destacó como una obra de arte única.

AFP

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720 toneladas de arena de playa para el Nacimiento

El impresionante pesebre de arena «Sand Nativity», exhibido en la Plaza de San Pedro en 2018, fue esculpido con 1.300 metros cúbicos de arena traída de una playa italiana. Este material, trabajado con agua y presión para darle firmeza, permitió al Patriarcado de Venecia y la ciudad de Jesolo entregar su obra más ambiciosa hasta la fecha.

El pesebre fue elaborado durante semanas por un equipo internacional de artistas: Richard Varano (EE. UU.), Ilyá Filimóntsev (Rusia), Susanne Ruseler (Holanda) y Rodovan Ziuny (República Checa). En su mensaje, el Papa Francisco destacó que la arena, considerada un «material pobre», simboliza la humildad y la simplicidad con las que Dios se reveló en el Nacimiento de Jesús en la pobreza de Belén.

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El Belén que encendió polémica en redes

El pesebre del Vaticano en 2020, de estilo postmoderno, generó desconcierto y críticas en redes al incluir figuras poco convencionales como un astronauta y un soldado metálico. Además, las imágenes principales, como María, José, los Reyes Magos y los animales del pesebre, seguían un diseño poco clásico. La presencia de estos elementos modernos desató polémica entre los visitantes y la audiencia global.

La figura del astronauta no fue casualidad. Las piezas, que fueron realizadas entre los años 60 y 70, coincidió con la llegada del hombre a la luna. Buscaba transmitir la universalidad del mensaje de Jesús, pero su enfoque contemporáneo generó críticas y muchos no se sintieron identificados con su propuesta innovadora.

Diócesis de Teramo)

Belén Vaticano

Llega Perú al Vaticano

En 2021, la Plaza de San Pedro presentó por primera vez un pesebre hispanoaméricano, procedente de Perú, con elementos distintivos de la cultura andina. El establo, con estructura de piedra cancanlla y techo de ichu, quiso reflejar la arquitectura de los pueblos Chopcca, vistiendo a los distintos personajes con trajes típicos.

El obispo de Huancavelica, Perú, destacó para Vatican News que «este pesebre tiene un significado muy grande para nosotros, representa la fe y la esperanza del pueblo Chopcca, pero también de todo Huancavelica y del Perú». Asimismo, subrayó que este Belén simbolizaba «la fe en Jesús y la esperanza de superar la pandemia y construir un país más solidario, justo y fraterno».

EFE

Los artesanos han reconstruido un Belén inspirado al de San Francisco y Macra, en la provincia de Cuneo (norte de Italia)

Volver a los orígenes de la tradición

En la Navidad pasada, la Plaza de San Pedro rindió homenaje al primer Belén de la historia, recreando el ambiente de 1223 cuando san Francisco de Asís, inspirado por su visita a Tierra Santa, pidió representar el nacimiento de Jesús en Greccio, un pueblo en Italia que evocaba Belén. Los artesanos de Macra, en la provincia de Cuneo, Italia, elaboraron un pesebre especial para conmemorar los 800 años de aquel momento histórico, capturando la sencillez que caracterizó el gesto de san Francisco.

Este Belén fue impactante no solo por su significado histórico, sino también por su capacidad de conectar a los fieles con los orígenes de esta tradición navideña. La representación logró transmitir la esencia de humildad y devoción que el santo italiano buscó al recrear el nacimiento de Jesús, convirtiéndose en un recordatorio de la fe y la humanidad en medio de la celebración navideña.

AFP

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