Dejar de fumar justo antes del embarazo también conlleva riesgo para el feto
Un equipo de científicos de China y Suiza han realizado un estudio con 12,1 millones de parejas madre-hijo
Los riesgos de fumar durante el embarazo son bien conocidos por todos. Sin embargo, hacerlo hasta un día antes de concebir, aunque fuera un solo cigarrillo, podría tener repercusiones en la salud del bebé.
Así lo revela un estudio publicado en la revista Journal of Epidemiology & Community Health que, si bien es un estudio observacional en las que las conclusiones no son firmes, los autores creen que los resultados avalan esta afirmación: no hay un período ni un nivel seguro de consumo de tabaco poco antes o durante el embarazo.
Los últimos datos en España, recogidos en 2019 por el Instituto de Salud Carlos III, muestran que una de cada cinco embarazadas fuman durante la gestación. En Estados Unidos, lo hacen una de cada diez mujeres.
Problemas de salud neonatal
Un equipo de científicos de China y Suiza, liderados por Lili Yang, de la Universidad de Shandong (China), tomaron los datos nacionales de nacimientos en Estaos Unidos entre 2016 y 2019, un total de 15,3 millones de nacimientos vivos. A continuación, se excluyeron los partos múltiples, las mujeres con presión arterial alta o diabetes antes del embarazo, o sin información sobre el consumo de cigarrillos en los tres meses anteriores y durante su embarazo. El número se redujo a 12,1 millones de parejas madre-hijo para el estudio.
Las mujeres que consumían tabaco tenían más factores de riesgo de problemas de salud neonatal. Los principales problemas fueron: necesidad de ventilación asistida inmediatamente después del parto; ventilación asistida durante más de 6 horas; ingreso en la Unidad de Cuidados Intensivos para ventilación mecánica continua; sospecha de sepsis, convulsiones o problemas neurológicos graves. La prevalencia de los problemas fue ligeramente inferior al 9,5 %.
Si la madre fumaba antes del embarazo, el riesgo de tener más de un problema grave de salud neonatal era un 27 % mayor, que podía aumentar hasta un 32 % si lo extendía durante la gestación. En el caso de riesgo en cuidados intensivos neonatales, se trata de un 24 % en los meses previos, que volvía a ascender hasta un 32 % durante el embarazo.
Según si fumaban antes, durante el primer trimestre, el segundo o el tercero, las posibilidades de que el recién nacido sufriera algún problema de salud es de un 12 %, un 23 %, un 40 % y un 21 % mayores, respectivamente.
Fumar uno o dos cigarrillos antes del embarazo tenía un riesgo del 16% en la madre y un 13 % en el hijo, mientras que si fumaban 20 cigarrillos al día, ascendía hasta el 31 % en la madre y al 29 % en el hijo.