Quesitos

¿Son los quesitos un alimento saludable?

El queso tradicional es un producto lácteo que forma parte de una dieta equilibrada y saludable

El queso es un producto lácteo que tradicionalmente forma parte de una dieta equilibrada y saludable como la mediterránea. Según distintos estudios una dieta equilibrada debería incluir tres raciones de lácteos al día. Leche, yogur o queso deben formar parte, por tanto de cualquier dieta equilibrada.

María Purificación González, profesora de Nutrición y Bromatología en la Universidad CEU San Pablo, explica: «Las recomendaciones dietéticas actuales reconocen la contribución de los quesos a una dieta saludable porque son ricos en múltiples nutrientes. Constituyen una fuente de proteínas de elevada calidad nutricional y digestibilidad, componentes lipídicos bioactivos, elementos minerales, sobre todo calcio, fósforo, cinc y magnesio, y vitaminas esenciales como vitaminas A, D, B2 y B12» y añade: «El consumo de queso, debido a que todos estos compuestos se encuentran implicados en numerosas funciones vitales, se asocia a beneficios significativos para la salud en todas las edades y en el marco de una dieta saludable. Por ejemplo, los quesos y otros productos lácteos (yogur) ocupan un lugar básico en la dieta infantil porque contribuyen al desarrollo físico y cognitivo».

¿Es todo el queso 'queso'?

Pero, ¿qué pasa con los quesos rallados, quesitos en porciones y las lonchas fundentes para sandwich? ¿Son todos iguales? ¿Qué diferencia hay entre los fundidos y los naturales?

El dietista, experto en microbiota y divulgador con miles de seguidores en redes sociales Miodrag Borges, explica en su canal de Instagram que «los quesitos en porciones no son una opción saludable. Nos encontramos con una especie de sucedáneo del queso» y añade: «Da igual que hablemos de los formatos clásicos o las versiones, supuestamente Light, porque incluirán mantequilla, sales de fundido, conservantes, estabilizantes, correctores de acidez o incluso agua. No es ni mucho menos una buena opción», concluye.

En esta misma línea, un informe de la OCU concluyó que no todos estos 'quesos' están elaborados únicamente a partir de queso, sino a partir de una mezcla de queso natural con otros ingredientes como la mantequilla, las proteínas de leche, las sales fundentes, los conservantes o los almidones.

Qué pasa con los quesos rallados

En el caso concreto de los quesos rallados del súper, por ejemplo, la OCU explica: «Los denominados quesos rallados fundidos son similares en composición a los clásicos quesitos en porciones y las lonchas fundentes para sandwich». «El problema para el consumidor es que los quesos rallados fundidos pueden confundirse fácilmente con un queso rallado natural. Primero, porque en el supermercado se encuentran los unos junto a los otros. Y segundo, porque el calificativo fundido no siempre aparece en el frontal del etiquetado».

Este tipo de queso suelen ser más baratos que el queso natural rallado así que esto puede orientar sobre los ingredientes reales de esa bolsa de queso rallado. «Revise el etiquetado y confirme que no lleva impresa la denominación fundido», concluye la OCU.