Los ocho alimentos que debes comer si estás cansado y triste en primavera
Fatiga, somnolencia, insomnio o ansiedad son algunos de los síntomas de la astenia primaveral
Con la llegada de la primavera, la alteración de las temperaturas, el aumento de la exposición a la luz solar y el cambio horario pueden causar efectos físicos y emocionales en algunas personas.
Fatiga, somnolencia, insomnio, ansiedad, falta de energía, falta de apetito, tristeza, disminución de la libido o dificultad para concentrarse son algunos de los síntomas que pueden experimentar quienes sufren lo que se conoce como astenia primaveral. Según datos de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación, esta enfermedad afecta a 4 de cada 10 personas.
Desajustes hormonales
Cristina Morillo, nutricionista de BluaU de Sanitas explica: «Estos cambios ocasionan desajustes en los ciclos hormonales, los cuales son canalizados por el hipotálamo, la glándula del cerebro encargada de regular el sueño, el apetito o la temperatura corporal, entre otros. Para disminuir los síntomas es aconsejable llevar a cabo una dieta que sea equilibrada y variada, que aporte los nutrientes y la energía necesaria para sobrellevar esta época», explica.
Qué se debe comer
Ante esta situación, los expertos de Sanitas han elaborado un listado con una serie de recomendaciones nutricionales entre las que se encuentran consumir alimentos ricos en vitaminas y nutrientes, así como una ingesta adecuada de agua para garantizar la hidratación:
Agua o infusiones
Para mantener un nivel correcto de hidratación es muy importante de cara a combatir la astenia primaveral. No se debe prescindir de ella y es recomendable beber en función de nuestra sensación de sed (agua o infusiones), evitar la ingesta de bebidas alcohólicas y reservar los refrescos para ocasiones especiales.
Aguacate
El aguacate es un alimento imprescindible para combatir este trastorno debido su gran cantidad de vitaminas, alto valor nutricional y su aporte de grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, esenciales para el buen funcionamiento metabólico y el control del colesterol, pero cuidado con la cantidad, ya que también es un alimento altamente energético.
Chocolate negro
El cacao ayuda sobre todo a la concentración. También es capaz de incentivar el sistema nervioso central y mejorar el estado de ánimo, algo relevante ya que la tristeza es uno de los síntomas más comunes de la astenia primaveral. Además, cuanto mayor sea el porcentaje de cacao, mayor valor nutricional tendrá.
Dátiles
Los dátiles proporcionan una buena cantidad de ácido fólico, magnesio, hierro y vitamina B3. Cabe mencionar que se trata de una buena fuente de energía, pero contiene una gran cantidad de azúcares y calorías, por lo que no es conveniente consumirlos en exceso.
Espárragos blancos y verdes
Los espárragos blancos y verdes aportan numerosos nutrientes al mismo tiempo que proporcionan una gran dosis de fibra y antioxidantes. Ayudan a recuperar fuerzas y a estar más positivos gracias a que son ricos en vitaminas C y E.
Fresas
Las fresas ayudan a fortalecer el sistema inmunitario y aportan ácido fólico, vitamina C y minerales (magnesio y cobre). Además, se trata de una fruta propia de la temporada primaveral por lo que su riqueza nutritiva es aún mayor.
Frutos secos
Los frutos secos proporcionan gran cantidad de grasas saludables, aminoácidos y vitaminas que dotan de energía al organismo. Por lo tanto, es aconsejable consumir dos puñados de nueces, avellanas, anacardos o pistachos al día, siempre al natural o tostados, pero sin sal añadida.
Pescado azul
Para combatir la fatiga derivada de la astenia primaveral los pescados azules son una muy buena opción, pues contienen gran cantidad de minerales y Omega 3. Este nutriente ayuda a que los niveles de serotonina se mantengan estables, combatiendo la depresión y mejorando el estado de ánimo.
Plátano
El plátano aporta múltiples beneficios tales como el triptófano (conocido por ser un antidepresivo natural), la fibra, los minerales o el potasio. Además, se trata de un producto muy energético.
En definitiva, aunque la astenia primaveral es un trastorno temporal y leve, una buena alimentación es la mejor manera de hacerla más llevadera. No obstante, en caso de que los síntomas sigan persistiendo pasados quince días, es aconsejable visitar a un especialista, ya sea de manera presencial o a través de videoconsulta, para realizar una revisión más completa.