Alimentación
¿Tiene fecha de caducidad el turrón? Todo lo que debes saber para conservar tus dulces navideños
Los turrones y otros dulces típicos de la Navidad son alimentos que no pueden faltar en las abundantes comidas familiares de las fiestas navideñas, pero el resto del año no gusta tanto comérselos. Si acaban sobrando al final de las Navidades, lo que determinará si se pueden conservar hasta las siguientes fiestas es su fecha de consumo preferente, ya que, por lo general, los turrones carecen de fecha de caducidad.
Habitualmente, la fecha de consumo preferente impresa en el envase de estos dulces suele ser de un año natural. Su alto contenido de azúcar absorbe la humedad de los alimentos e impide el desarrollo de microorganismos, haciendo que duren más. El consumo preferente establece la fecha en la que, un alimento de vida útil larga, perderá sus propiedades nutricionales originales. Por lo tanto, un turrón que haya pasado su fecha de consumo preferente, seguirá siendo apto para su consumo pero podría suponer cambios de textura, sabor y color.
Turrones blandos y artesanales son más propensos a generar moho, así que hay que estar atentos y revisarlos al llegar esta fecha.
Condiciones de conserva
Dicho esto, es importante tomar precauciones y cuidar la forma en la que se almacenarán los dulces típicos hasta las Navidades del 2025. Las condiciones en las que mejor se conservan estos alimentos son las siguientes:
- En el congelador. El tiempo de preservación aumenta siempre y cuando se congele antes de su fecha de consumo preferente. En ausencia de congelador, en la nevera también se disminuye la actividad microbiana. Atención al momento de abrirlos, porque si ha pasado tiempo desde la fecha de consumo preferente, deben consumirse justo después de descongelarlos.
- Herméticamente cerrados. En su envoltorio original preferiblemente, pero si no cubiertos con papel de aluminio o en un tupper hermético para que no pierdan consistencia.
- A oscuras. En una despensa sin mucha luz tendrá menos exposición a la oxidación que prevendrá inflamación intestinal y sabores rancios entre sus consumidores.
La correcta conservación del turrón puede suponer un ahorro para el diciembre de 2025 en una de las épocas más demandantes, económicamente hablando, del año.