Diferencias Ibuprofeno y Paracetamol

Salud

Las diferencias entre el Ibuprofeno y el Paracetamol

El Ibuprofeno y el Paracetamol forman parte de los medicamentos más utilizados en nuestro país, tanto con receta como sin ella. Su uso frecuente se hace sobre todo cuando tenemos dolores y molestias pequeñas, como el dolor de cabeza, de tripa, algo de fiebre o dolores derivados de la menstruación.

La mayoría de las veces que hacemos uso de ellos nos tomamos el que más a mano tenemos o el que creemos nosotros que nos aliviará más eficazmente el dolor. Si nos acostumbramos a hacer esto, a largo plazo podría tener un efecto perjudicial en nuestra salud. Es importante tener claras las diferencias entre ambos y saber en qué momentos se debe utilizar cada uno.

Qué es el Ibuprofeno

El Ibuprofeno (Neobrufen, Nurofen, Espidifen o Saetil). Este medicamento actúa como analgésico, antiinflamatorio o para el control de la fiebre.

Un punto negativo en su uso es que puede dañarnos el estómago, por lo que no es recomendable que personas que sufran problemas estomacales hagan uso de él. Tampoco, las que tengan problemas cardíacos. En estos casos, solo se debe tomar bajo supervisión médica. Por los efectos adversos que puede producir, se recomienda consumirlo cuando hayamos ingerido algo de comida.

Cuándo podemos usarlo

Pueden utilizar ibuprofeno para tratar molestias y dolores leves y moderados todas las personas, niños, adolescentes y mayores, que no sufran ninguna de las patologías citadas anteriormente. Es eficaz cuando nos encontramos ante dolores menstruales, dentales, de garganta, musculares o lesiones, por sus propiedades antiinflamatorias. También, para los tratamientos postoperatorios o para la artritis y artrosis. Si el paracetamol no es suficiente, podremos usarlo para bajar la fiebre o en este caso, combinar ambos.

Tomar una dosis entre 400 y 600 mg, suele resultar suficiente para aliviar ese dolor o inflamación. Es importante no hacer un uso excesivo. Si se superan los 1.200 mg en 24 horas, producirá grandes daños sobre la mucosa gástrica y efectos secundarios.

Qué es el paracetamol

El Paracetamol (Gelocatil, Termalgin, Efferalgan o Lumado) es, sobre todo, analgésico y aintipirético. Es decir, actúa para controlar el dolor y la fiebre.

A diferencia del Ibuprofreno, este no produce ningún tipo de malestar en el estómago, pero si se toma en exceso, puede dañar el hígado. Otra diferencia, es que no es necesario haber comido nada antes. Se puede consumir simplemente con agua, zumo o leche.

Cuándo podemos usarlo

Si nos encontramos ante dolores de cabeza, lumbagos, dolores de huesos, fiebre o malestar derivado de la gripe, siempre que estos dolores sean leves o moderados, podemos utilizarlo. Cuando lo ingerimos, su manera de actuar es bloqueando la generación del dolor en el sistema periférico y ayuda, también, a controlar la temperatura de nuestro cuerpo, cuando actúa sobre el centro hipotalámico.

Las dosis pueden variar entre los 500 mg y 1 g y se aconseja, tomarlo cada 8 horas, según el dolor. No se deben superar los 3 g al día, así evitaremos daños hepáticos de manera grave.