Un hombre pasea junto a un centro comercial en PekínAFP

Covid-19

El falso milagro chino que ha terminado con las muertes por coronavirus

Shanghái no ha registrado ni un solo fallecimiento a pesar de las denuncias de falta de opacidad a la hora de comunicar los decesos en los hospitales y sus causas

«Cuando en China, que no es el país más trasparente del mundo, aparentan transparencia desde el minuto uno, a mí me da qué pensar y me preocupa». Las palabras del Pedro Cavadas al inicio de la pandemia del coronavirus vuelven a estar ahora de actualidad después de que el gigante asiático no haya reportado ni una muerte por esta infección a pesar de que el brote desatado el pasado mes de marzo ha provocado 220.000 contagios.

En enero de 2020, mientras el Ministerio de Salud instaba a no caer «en falsos alarmismos», el cirujano valenciano advertía de la gravedad del virus y dudaba de los datos aportados por China hasta el momento, con apenas 170 muertos: «No hace falta ser muy listo como para pensar que son 10 o 100 veces más».

En todo el mundo se han registrado más de 500 millones de contagios y 6,2 millones de muertes. En España, por ejemplo, el número de contagios asciende a 11,6 millones con más de 100.000 muertos para poco más de 47 millones de habitantes. Pero el caso de China es prácticamente único en el mundo.

De acuerdo con las cifras oficiales de Pekín, en China se han contabilizado medio millón de contagios y 4.638 muertes desde que comenzó la pandemia para una población de casi 1.500 millones de personas.

En la ciudad de Shanghái, uno de los motores económicos de China, un nuevo brote está provocando más de 20.000 infecciones diarias a pesar del estricto confinamiento impuesto a la población, que ya ha comenzado a protestar por la falta de suministros y alimentos. Sin embargo, esta ciudad de 25 millones de habitantes no ha registrado ni un solo muerto.

La embajada China en Londres publicó hace unos días un comunicado en el que alababa los efectos de la estrategia «covid cero» impuesta por el Gobierno chino en contra de las críticas «provenientes de algunos médicos occidentales» que buscan «sembrar discordia, crear pánico y difamar a China».

Familiares de fallecidos denuncian en redes la opacidad de los hospitales

No obstante, las pocas filtraciones que salen del país advierten de un gran número de personas, principalmente ancianos, que están muriendo en los hospitales en medio de un clima de opacidad y falta de información.

Familiares de varios pacientes fallecidos en el Hospital Geriátrico Donghai de Shanghái aseguraron a la agencia AP que los muertos no fueron atendidos adecuadamente después de que los estrictos protocolos dejaran al centro sin personal. En las redes sociales, algunas personas están denunciando que no reciben ninguna explicación de la muerte de sus familiares ni consiguen acceder al acta de fallecimiento.

La OMS ha advertido en varias ocasiones que la tasa de letalidad varía entre países y está muy condicionada por la cobertura de vacunación. El caso chino, sin embargo, es paradigmático: es de los países con menos casos de contagios por habitantes y menos muertes por infección a pesar de que el 40 % de los mayores de 80 no tiene ninguna vacuna y alrededor de 50 millones de personas mayores de 60 no tiene la pauta completa, según datos de la Comisión Nacional de Sanidad de China. Sin duda, solo se puede calificar de milagro chino.

Enfrentamientos con la policía

Los habitantes de Shanghái se han enfrentado estos días a policías que les pedían ceder sus apartamentos para hacer sitio a pacientes contagiados, según ha revelado AFP de vídeos publicados en las redes sociales.
Los residentes, confinados desde principios de abril, se han quejado de la falta de alimentos y del excesivo celo de las autoridades en hacer cumplir las cuarentenas. Al mismo tiempo las autoridades buscan alistar miles de camas para albergar a los pacientes de covid.
El jueves por la noche, varios vídeos que circulaban en las redes sociales mostraron a residentes en el exterior de sus viviendas gritando a los agentes que portaban trajes protectores.
El incidente se produjo cuando las autoridades ordenaron a 39 personas poner a disposición sus viviendas «en respuesta a las necesidades de prevención y control de la epidemia», y albergar en sus apartamentos a pacientes afectados por el virus, según Zhangjiang Group, promotor del complejo de viviendas.