Estos alimentos ayudan a la piel a frenar el impacto solar a largo plazo

Siempre se ha hablado de la importancia de incluir la fruta y la verdura en la dieta para la salud de las personas. Una nueva investigación, publicada en el Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics e investigada por los expertos de la Universidad California Davis (EEUU) ha ido un paso más allá.

Gracias a su estudio se ha definido de una manera más detallada que hay una serie de vegetales que protegen a las personas a largo plazo del sol. Para ello, identificaron 20 estudios con 13 alimentos de origen vegetal, incluidos 8 frutas y verduras, dos nueces y legumbres y tres bebidas ricas en polifenoles. Los productos utilizados en las intervenciones dietéticas incluyeron alimentos integrales, pastas nutricionales, bebidas, jugos y extractos

La Catedrática de Nutrición y Bromatología de la Universidad CEU San Pablo, Elena Alonso Aperte, ha explicado a El Debate los beneficios de estas frutas y verduras. «Hay cierta evidencia científica, al igual que estudios, que explican que lo que mejor protege de los efectos del sol al largo plazo son las sustancias antioxidantes».

Se entiende por sustancias antioxidantes a los compuestos que se encargan de retrasar o prevenir el daño o deterioro de las células. Entre ellos destacan los polifenoles, carotenoides, xantofilas, la vitamina C y la E.

«Todas estas sustancias ejercen un efecto antioxidante, que es el que previene de los efectos a largo plazo de la exposición al sol, que al fin y al cabo lo que genera es una situación de estrés oxidativo, de formación de radicales libres, por los que el organismo normalmente tiene defensas contra ello. No obstante, también puede utilizar como defensas componentes que vienen de la dieta», apunta la experta del CEU San Pablo.

Frutas como el tomate, mango, uvas, maracuyá, coles, melón o naranjas, entre otras, son más protectoras ante los efectos del solElena Alonso Aperte

También se han desarrollado una serie de complementos alimenticios que se utilizan como protección de los efectos deletéreos del sol para preparar a la persona antes de la exposición. «Las frutas contienen gran parte de estas sustancias antioxidantes, por lo que una dieta que sea rica en tomate, mango, uvas, maracuyá, coles, melón o naranjas, entre otras, son más protectoras ante los efectos del sol».

A pesar de esto, según la Catedrática, es muy arriesgado hablar de sustitutivos de la protección solar en cremas: «Las cremas de protección solar nos protegen es de los efectos agudos de la exposición al sol generando una pantalla que evita la quemadura solar, y eso no lo vamos a conseguir con las frutas, ni con los antioxidantes, ni con los complementos alimenticios a base de antioxidantes».

El sol que hay en verano sobre España es de una gran intensidad, ya que en latitudes como la nuestra la capa de ozono que nos debería de proteger de la radiación ultravioleta está deteriorada. Por lo que la radiación que incide sobre las personas es muy agresiva.

«Está bien que se recomiende el consumo de productos de origen vegetal por su contenido en antioxidantes, pero hay que seguir utilizando los protectores solares tópicos para evitar el efecto agudo de la radiación solar, como son las quemaduras, la piel envejecida, las arrugas y el riesgo de padecer los cánceres asociados a la piel», explica Elena Alonso Aperte.