¿Es cierto que duelen las articulaciones cuando llueve?
Los investigadores no se ponen de acuerdo sobre la relación entre la presión atmosférica y el dolor
Muchas personas creen que los cambios en las condiciones climáticas, incluidos los aumentos de la humedad, las precipitaciones o la presión atmosférica, provocan un empeoramiento de los síntomas del dolor articular o de espalda, especialmente entre las personas con artritis. Los investigadores no han podido confirmar definitivamente una conexión de causa y efecto. Algunos estudios sugieren que el clima puede afectar el dolor en las articulaciones, mientras que otros dicen que no existe ese vínculo.
Uno de los últimos estudios, realizados con datos de más de 11 millones de pacientes que visitaron las urgencias a lo largo de más de dos millones de días lluviosos y nueve millones de días secos, no encontró conexión entre el clima y los síntomas de dolor de espalda o en las articulaciones. No solo no hubo un patrón que vinculara los días con precipitaciones con más dolores y molestias, sino que hubo siete millones más de visitas en los días secos.
La clave, la presión atmosférica
Los estudios que sí afirman que puede haber relación se centran en los cambios en la presión atmosférica. Antes de que llueva, la presión tiende a disminuir, hay menos presión de aire ejerciendo sobre su cuerpo, lo que puede permitir que los músculos, tendones y otros tejidos que rodean las articulaciones se expandan. La expansión puede ejercer una presión adicional sobre ellas lo que puede provocar dolor.
Formas de minimizar el dolor articular:
- Hacer ejercicio regularmente. Estar físicamente activo ayuda a fortalecer los músculos y los huesos, lo que ayuda a aliviar la presión sobre las articulaciones.
- Estírate antes de moverte. Calentarás tus músculos y mejorarás tu flexibilidad, lo cual es bueno para tus articulaciones.
- Mantener el peso en un rango saludable. Tener sobrepeso ejerce una presión adicional sobre las articulaciones, incluidas las rodillas y las caderas.
- Use calor antes de la actividad y frío después. Una almohadilla térmica puede ayudar a relajar los músculos y relajarlo antes de la actividad y el frío después puede ayudar con la hinchazón y la inflamación.
- Mantener una actitud positiva ante la vida.