Bálsamo del tigre
Bálsamo del tigre: ¿es efectivo para el dolor muscular?
Actuaría «engañando» a las terminaciones nerviosas
Bálsamo del tigre, puede que su nombre cause cierta desconfianza pero lo cierto es que este ungüento con extractos de plantas para aliviar dolores musculares tiene su origen en la medicina tradicional china. En los últimos años, su uso se ha popularizado e incluso deportistas de élite recurren a este bálsamo para aliviar los dolores musculares y de las articulaciones, el dolor de cabeza o la congestión nasal.
Los botes de bálsamo del tigre se pueden comprar en herboristerías pero también en muchos supermercados, tiendas deportivas, farmacias o parafarmacias y, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), se podrían estar vendiendo cerca de 66 millones de unidades al año.
Aunque los estudios controlados son escasos y la evidencia limitada, hay indicios de que los ungüentos de bálsamo del tigre podrían ser útiles para el tratamiento del dolor de cabeza por tensión, y parecen ser capaces de aumentar el flujo sanguíneo de las piernas si se combinan con un masaje.
En teoría, el bálsamo del tigre actúa «engañando» a las terminaciones nerviosas con sensaciones de enfriamiento y calentamiento, interrumpiendo otras señales de dolor, según explican desde la OCU.
Su fórmula, según explican desde Mapfre, contiene una combinación de muchos ingredientes, algunos más activos que otros como: alcanfor, mentol, vaselina, parafina, aceite de canela, aceite de cajeput, aceite de cayena, aceite de eucalipto y clavo, de ahí su fuerte y característico olor.
Ingredientes
- El alcanfor tiene efectos refrescantes y favorece la circulación sanguínea.
- El mentol es analgésico. También puede ayudar a aliviar los resfriados y la congestión cuando se inhala.
- El aceite de cajeput es rubefaciente, antirreumático y estimulante.
- El aceite de canela proporciona efectos antiinflamatorios.
- El eucalipto puede ayudar a tratar la tos y los resfriados.
- El aceite de cayena reduce la inflamación.
Efectos secundarios
Especialistas de Mapfre explican que si nunca hemos utilizado el bálsamo y somos personas sensibles o con tendencia a padecer alergias, hay que probar una pequeña cantidad en el antebrazo y esperar un tiempo prudencial para valorar si aparece alguna reacción alérgica antes de aplicarlo en una zona más amplia.
Como efectos secundarios, en ocasiones puede causar enrojecimiento, picor, sensación de quemazón, irritación de la piel y dificultades respiratorias cuando se aplica en el pecho para la congestión.