Los accidente cerebrovasculares suponen más de 7 millones de muertes al añoGTRES

Los cinco factores que están aumentando de forma alarmante los casos de ictus

Los accidente cerebrovasculares suponen más de 7 millones de muertes al año

El ictus es una enfermedad cerebrovascular que se produce por la disminución u obstrucción del flujo sanguíneo. La sangre no llega al cerebro en la cantidad necesaria y, como consecuencia, las células nerviosas no reciben oxígeno, dejando de funcionar.

Aunque el ictus es prevenible y tratable, un nuevo e importante análisis del estudio llevado a cabo entre los años 1990 y 2021 de la Carga Global de Enfermedades, Lesiones y Factores de Riesgo (GBD), publicado en la revista The Lancet Neurology , ha alertado del gran incremento de casos a nivel mundial. Según el estudio, el número de personas que sufrieron un nuevo ictus aumentó a 11,9 millones en 2021, un 70 % más desde 1990.

Además, las estimaciones sugieren que, en todo el mundo, la cantidad total de discapacidad, enfermedad y muerte prematura (una medida conocida como años de vida ajustados por discapacidad [AVAD]) perdidos por accidentes cerebrovasculares aumentó un 32 % entre 1990 y 2021.

La carga de accidentes cerebrovasculares está aumentando en gran parte debido tanto al crecimiento de la población como al aumento del envejecimiento de la misma en todo el mundo, pero también debido a las contribuciones cada vez mayores de los factores de riesgo ambientales como son la contaminación del aire y las altas temperaturas, riesgos metabólicos y conductuales prevenibles.

Factores de riesgo

Entre 1990 y 2021, la carga mundial de accidentes cerebrovasculares relacionada con un índice de masa corporal (IMC) alto (un aumento del 88 %), temperaturas altas (un aumento del 72 %), niveles altos de azúcar en sangre (un aumento del 32 %), una dieta rica en bebidas azucaradas (un aumento del 23 %), una actividad física baja (un aumento del 11 %), una presión arterial sistólica alta (un aumento del 7 %) y una dieta baja en ácidos grasos poliinsaturados omega-6 (un aumento del 5 %) aumentó sustancialmente.

Qué debe preocuparnos

En 2021, los cinco principales factores de riesgo mundiales de accidente cerebrovascular fueron la presión arterial sistólica alta, la contaminación del aire por partículas en suspensión, el tabaquismo, el colesterol LDL alto y la contaminación del aire en el hogar, con una variación considerable según la edad, el sexo y la ubicación.

Por primera vez, el estudio sugiere que la contaminación del aire por partículas en suspensión es un factor de riesgo importante para la hemorragia subaracnoidea, que contribuye al 14 % de la muerte y la discapacidad causadas por este subtipo grave de ACV, a la par del tabaquismo.

El autor principal, el profesor Valery L. Feigin de la Universidad Tecnológica de Auckland (Nueva Zelanda) y profesor afiliado del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud (IHME) de la Universidad de Washington (EE.UU.), afirma: «El crecimiento global del número de personas que desarrollan un ictus y mueren o quedan discapacitadas por un ictus está creciendo rápidamente, lo que sugiere firmemente que las estrategias de prevención del ictus que se utilizan actualmente no son lo suficientemente eficaces» y añade: «Se deben implementar urgentemente en todo el mundo nuevas estrategias de prevención individual, motivacionales y de eficacia demostrada a nivel poblacional que se puedan aplicar a todas las personas en riesgo de sufrir un ictus, independientemente del nivel de riesgo, como se recomienda en la reciente Comisión de Neurología sobre el Ictus de The Lancet».