El estrés

El cortisol es un elemento crucial en la respuesta del cuerpo al estrésGTRES

Señales que alertan de tener alto el cortisol, según una neurocientífica

Esta hormona es un elemento crucial en la respuesta del cuerpo al estrés

El rápido ritmo de vida implica, en muchos casos, un aumento de los niveles de estrés. Cuando esto sucede se libera en el torrente sanguíneo más cortisol, una hormona esteroide producida por las dos glándulas suprarrenales, que se encuentran encima de cada riñón.

La Dra. Tara Swart, neurocientífica y psiquiatra, explica que el cortisol no es del todo malo: «Nuestros cuerpos necesitan cortisol. El cortisol, a menudo denominado 'hormona del estrés', es un elemento crucial en la respuesta de nuestro cuerpo al estrés. De hecho, puede ayudarnos a concentrarnos, aumentar la energía y reforzar la inmunidad».

La psiquiatra afirma que cuando nos enfrentamos a un desafío, «el cortisol nos da ese empujón extra para superarlo. Sin embargo, cuando los niveles de cortisol se mantienen altos durante períodos prolongados, pueden causar estragos en nuestra salud».

Qué pasa si tengo el cortisol alto

La profesora del MIT Sloan y del King’s College de Londres añade: «El estrés crónico y, en consecuencia, los niveles elevados de cortisol pueden perjudicar la función cognitiva, la memoria y el estado de ánimo. También puede aumentar el riesgo de ansiedad y depresión».

Al controlar los niveles de cortisol, podemos proteger nuestra salud cerebral y mejorar el bienestar general.

«Para lograrlo, es más eficaz limitar los comportamientos que aumentan el cortisol. Corregir esto tendrá un impacto mucho mayor que comer alimentos que reducen el cortisol: los alimentos pueden ayudar, pero solo de manera significativa si se abordan las causas subyacentes».

Factores que aumentan el cortisol

La Dra. Tara Swart afirma que el estrés no es el único factor que hace aumentar el cortisol, el sobrepeso, la falta de sueño, una dieta poco saludable, la falta de ejercicio o el exceso del mismo, el tabaco o el alcohol son factores fundamentales, pero la neurocientífica no se queda ahí y asegura que otras prácticas habituales del día a día de muchos ciudadanos también llevan a aumentar esta hormona como pueden ser saltarse comidas, ingerir cafeína con el estómago vacío o no beber suficiente agua.

Signos de tener el cortisol alto

La neurocientífica enumera los principales signos de tener el cortisol alto:

  • Aumento de peso en la cara, la zona media y la parte superior de la espalda.
  • Depósitos de grasa entre los omóplatos, también conocidos como joroba de búfalo
  • Despertarse de madrugada
  • Debilidad muscular y ósea
  • Presión arterial alta
  • Niveles altos de azúcar en sangre
  • Bajones de energía
  • Acné
  • Rostro enrojecido
  • Cicatrización lenta de las heridas
  • Fatiga
  • Irritabilidad
  • Dificultad para concentrarse
  • Antojos de azúcar y sal
  • Ansiedad
  • Depresión
  • Problemas para dormir
  • Disminución del deseo sexual
  • Problemas intestinales

Qué podemos hacer

Como explican los expertos, tener el cortisol elevado de manera habitual puede suprimir el sistema inmunológico, haciéndolo más susceptible a infecciones, además, pueden llevar a una mayor presión arterial y otros factores de riesgo para enfermedades del corazón. Niveles elevados de esta hormona pueden aumentar la glucosa en sangre, lo que a la larga puede contribuir al desarrollo de diabetes y aumentar el apetito y acumulación de grasa abdominal.

Para disminuir y regular el nivel de cortisol en el cuerpo, lo primero es reducir el estrés realizando ejercicio de forma regular, una dieta equilibrada, sueño adecuado y una vida social saludable.

Alimentos y vitaminas

La doctora elabora una lista con los principales alimentos y vitaminas que se debe incluir en la dieta:

  • Semillas
  • Té verde
  • Chocolate negro
  • Aguacate
  • Aceite de oliva
  • Hojas verdes
  • Frutos del bosque
  • Probióticos
  • Omega-3
  • Magnesio
  • Vitamina C

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