Los mejores jabones para cuidar el pelo y la piel, según los dermatólogos

Lavarse el pelo a diario, dos veces a la semana o en días alternos es una de las dudas más frecuentes en las consultas de dermatología, sin embargo más allá de la frecuencia los expertos aseguran que el cabello de cada persona es único y tiene necesidades diferentes.

El Dr. Sebastian Podlipniksi, dermatólogo del Hospital Clínic de Barcelona, afirma que en el caso del cabello graso puede ser necesario lavarlo con más frecuencia, cada dos días o incluso a diario, para controlar el exceso de producción de grasa.

En un pelo normal cada dos o tres días para que los aceites naturales del cuero cabelludo nutran el cabello sin provocar un exceso de grasa.

En aquellas personas con cabello seco se recomienda lavarlo con menos frecuencia, unas dos veces por semana. Esto ayuda a retener la humedad y a evitar que el cabello y el cuero cabelludo se sequen más.

Otro asunto importante son los productos que se pueden usar. Muchos champús contienen sulfatos, parabenos y otras sustancias químicas que pueden hacer daño al pelo. Optar por productos naturales sin químicos puede ser una gran opción para cuidar el cuero cabelludo y el cabello. Además, se recomienda evitar el uso excesivo de planchas, secadores y tintes, sobre todo durante el otoño.

En una entrevista en Infosalus, la doctora Luisa Martos, dermatóloga, y especialista en el Servicio de Dermatología del Hospital Universitario de la Princesa en Madrid, explica que se debe prestar atención a los ingredientes, evitar los componentes agresivos, y en consecuencia seleccionar productos: «No es necesario gastar mucho dinero en productos caros; lo más importante es la calidad de los ingredientes y cómo se adaptan a tus necesidades específicas».

Para los cabellos secos, la dermatólogo aconseja optar por activos como aceites naturales (argán, coco, jojoba), manteca de karité, y glicerina.

Mientras, para los cabellos grasos, se necesitan ingredientes que controlen el exceso de sebo sin eliminar los aceites esenciales, entre ellos, piritionato de zinc, ketoconazol, o ácido salicílico, según detalla.

A su vez, menciona que en el caso de los cabellos finos, se tienen que buscar champús voluminizadores, y que no pesen el cabello. Finalmente, para el cabello rizado, sostiene que se trata de un tipo de cabello «necesitado de mucha hidratación y definición», por lo que apuesta por champús que incorporen aceite de coco, o de jojoba.

Doble lavado

El doble lavado del cabello se ha convertido en una técnica popular para quienes buscan una limpieza más profunda y efectiva. El primer lavado se centra en eliminar residuos de productos de estilizado, aceites y suciedad acumulada en el cuero cabelludo y el cabello. El segundo lavado permite que el champú penetre mejor, proporcionando una limpieza más profunda y efectiva. Para cabellos más gruesos y densos, el doble lavado asegura que todo el cabello y el cuero cabelludo se limpien adecuadamente.

Qué jabón usar para la piel

Para la piel, la doctora Luisa Martos explica en Infosalus que la piel de los seres humanos presenta un pH ligeramente ácido, alrededor de 5.5. Por eso la experta explica que, para la piel, lo mejor es usar jabones que se acerquen a este pH para ayuda a mantener la barrera natural de la piel y evitar la irritación, al mismo tiempo que posean, además, ingredientes naturales e hidratantes.

La doctora Martos asegura que para las personas con piel sensible o condiciones como eczema, los jabones hipoalergénicos como los 'syndet' son una buena opción: «Los 'syndets' son detergentes sintéticos (synthetic detergents), también llamados 'jabones sin jabón', son agentes limpiantes con un pH parecido al de la piel, por lo que evita la alteración de la barrera protectora de la piel ideales para las pieles delicadas y sensibles). Los jabones con ingredientes hidratantes como glicerina, aceite de jojoba, o aceite de oliva ayudan a mantener la piel hidratada», concluye la experta.