Hamburguesa americana

La ciencia explica por qué nunca deberías pedir la hamburguesa poco hecha

Los cortes de carne como el chuletón o solomillo no tienen este riesgo

A pesar de que los amantes de la carne afirman que debe comerse al punto o poco hecha, aquellos que siempre optan por las hamburguesas muy hechas están de enhorabuena. La respuesta la aportan los científicos que afirman que aquellas que se sirven crudas o poco hechas pueden contener bacterias dañinas y causar una intoxicación alimentaria.

Los expertos señalan que existe diferencia entre comer un corte de carne crudo o poco hecho respecto a una hamburguesa. Un chuletón, por ejemplo, se puede comer 'sangrante' sin riesgo porque las bacterias dañinas suelen estar en la superficie y mueren cuando se quema por fuera, lo que hace que el filete, solomillo o entrecot sea seguro para comer aunque se quede crudo por dentro.

Cuando la carne se pica para producir hamburguesas, cualquier bacteria dañina de la superficie de la carne cruda se propaga por toda la hamburguesa.

A menos que la carne picada se cocine por completo las bacterias pueden permanecer vivas en el interior

Esto se aplica a todas las hamburguesas, incluidas las hechas con carne de buena calidad. Es por eso que debe servirse bien cocinada, mientras que un filete puede servirse poco hecho.

Las principales bacterias patógenas en carne cruda son Escherichia coli, presente sobre todo en la carne picada; Salmonella, otra de las principales bacterias asociadas a la carne poco hecha o cruda; Campylobacter jejuni o Listeria monocytogenes. Estos microorganismos suelen crecer de forma rápida cuando la carne no se refrigera.

Cocinar alimentos a altas temperaturas generalmente mata las bacterias contenidas en los alimentos. Sin embargo, las bacterias pueden haberse propagado por las superficies donde ha estado en contacto. Para evitar riesgos de intoxicación alimenticia, los expertos recomiendan:

Recomendaciones

  1. Al comprar la carne hay que refrigerar o congelar inmediatamente, ya que las bacterias crecen rápidamente a temperatura ambiente.
  2. Conservar siempre por debajo de los 5 °C, hasta que la carne esté lista para preparar y servir.
  3. Cocinar la carne picada dentro de no más de uno o dos días después de la compra. Si no es mejor congelarla.
  4. Para descongelar la carne, colóquela en un recipiente o plato limpio que contenga los jugos crudos que puedan derramarse.
  5. A la hora de cocinar, lavarse las manos antes y después de tocar carne cruda.
  6. Asegurarse de que los jugos de la carne cruda no entran en contacto con otros alimentos.
  7. Limpiar todos los utensilios, equipos y superficies después de preparar carne cruda.