La Palma
La colada parada se ensancha por los derrames en La Laguna y se reactivan las otras
El director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, ha concretado que el ensanchamiento de la colada más al noroeste, se debe a los derrames provocados por las roturas parciales del cono secundario
Los derrames de lava que se han producido en las últimas horas por la reconfiguración de los centros eruptivos del volcán de La Palma han ensanchado la colada que más preocupa en estos momentos, la que se ha quedado parada en el barrio de La Laguna. Además esta tarde se ha registrado un terremoto de 4,9 en La Palma, el de mayor magnitud hasta ahora.
En paralelo, el comité científico del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca) ha constatado una mayor irrigación de lava al resto de coladas, a través fundamentalmente de tubos volcánicos, sobre todo en la primigenia, la que formó la fajana, que podría estar recibiendo aporte directamente de uno de esos tubos. El Debate te ayuda con una guía práctica para hablar de volcanes: todos los términos necesarios.
El director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, ha concretado que el ensanchamiento de la colada más al noroeste se debe a esos derrames provocados por roturas parciales del cono secundario, especialmente en la zona cercana a Tacande.
También ha indicado que en La Laguna «casi no ha avanzado un metro» en las últimas 24 horas, y que siguen pendientes del posible avance de esta lengua, si hacia el norte o el sur de la montaña homónima.
Lo «deseable», ha dicho, es que la segunda opción, ya que evitaría más daños en viviendas, y es que el volcán ya ha destruido desde que comenzó a erupcionar el pasado 19 de septiembre 1.030.
En caso de seguir el curso de las vaguadas, lo que más afectaría serían fincas de plátanos. La cifra de evacuados supera los 7.000 y la de realojados en hoteles, o centros sociosanitarios en el caso de personas dependientes, se eleva a 463.
En este sentido, los últimos datos del programa Copernicus de la UE correspondientes a este viernes –actualización número 27– apuntan a que la lava que expulsa el volcán había afectado 889 hectáreas de superficie en La Palma y destruido 2.263 infraestructuras, mientras que la ceniza ha cubierto 6.800 hectáreas de terreno. Por su parte, de las 2.263 infraestructuras dañadas por la lava, 2.129 han sido destruidas y 134 han sufrido daños; mientras que respecto a las carreteras, son 64,9 los kilómetros de vías destruidas y otros 3,5 kilómetros que podrían tener daños.
La medición realizada ayer viernes de emisión de dióxido de azufre (SO2) asociado al penacho volcánico alcanzó valores de 31.600 toneladas, lo que da cuenta de el vigor del proceso eruptivo.
La responsable de la red de vigilancia volcánica del Instituto Geográfico Nacional (IGN), Carmen López, ha indicado sobre el descenso de la sismicidad profunda que hay que esperar varios días para poder hablar de una tendencia a la baja de este parámetro.
En caso de que así sea, ha explicado, seguiría un patrón que ya sucedió en la erupción del volcán submarino Tagoro en El Hierro, hace diez años. Primero desapareció la sismicidad profunda, luego la intermedia, y pasadas las semanas fueron mejorando otros parámetros de la red geoquímica y las deformaciones.
López ha abundado en que en el caso de la erupción de La Palma se están observando «algunos rasgos» como el descenso de la sismicidad profunda, pero «es pronto para predecir que vaya a ser continuada».
En cuanto a la emisión de dióxido de carbono, ha indicado que debería confirmarse una tendencia descendiente que «aún no tiene», y ha añadido que los valores de los últimos días aún son «altos» y que deberían ser «significativamente más bajos» para pensar en el final del proceso eruptivo.
El último informe del comité científico del Pevolca destaca que el efecto de la inversión térmica (de 3 a 4 grados centígrados) se sitúa entre 1.500 a 2.000 metros y que el régimen local de vientos en El Paso, Los Llanos y Tazacorte están produciendo una zona de convergencia que está favoreciendo la acumulación de SO2 en esa cuenca.
Respecto a la calidad del aire, en lo relativo al dióxido de azufre (SO2), desde anoche se están registrando valores altos de concentración en las estaciones de Los Llanos, El Paso, Tazacorte y Puntagorda.
Los valores medios horarios se han incrementado significativamente durante las últimas horas de la madrugada y primeras de la mañana, de modo que, en el caso de Los Llanos, a las 9:00 horas se ha registrado el tercer valor horario consecutivo de concentración por encima de los 500 unidades por metro cúbico, que es el valor de referencia de umbral de alerta a la población.
Durante este periodo los valores registrados en las estaciones de Tazacorte y El Paso también han registrado medias horarias superiores a dicho valor.
Si bien no lo han hecho durante tres horas consecutivas sí se considera que existe un riesgo de alcanzar estos niveles, por lo que se darían las circunstancias para alertar a la población del Valle de Aridane.
Con respecto a las partículas menores de 10 micras (PM10), ayer se observaron de forma general unas concentraciones inferiores a días anteriores, sin que se registre superación del umbral diario (establecido en 50 unidades/metro cúbico), en ninguna de las estaciones de la red de calidad del aire. La altura de columna de cenizas y gases medida hoy, alcanza los 3.000 metros.
La disposición actual de la nube de cenizas y SO2 es hacia el suroeste del foco eruptivo y se espera que se disponga hacia el oeste/noroeste las próximas horas.
La posición esperada del penacho supone un escenario favorable para la operatividad aeronáutica. Se han registrado precipitaciones en general de carácter débil en vertiente norte y este de La Palma y estas precipitaciones, entre débiles y localmente moderadas, seguirán siendo probables para lo que queda de sábado, domingo y lunes. Principalmente las precipitaciones se registrarán en vertiente norte y este, así como en zonas de interior y oeste.