El Gobierno controlará la venta y distribución de los cigarrillos electrónicos

El Ministerio de Sanidad tiene un nuevo objetivo: reformar la ley de lucha contra el tabaquismo, tal y como la que aprobó el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero en 2006.

La nueva propuesta realizada por el Gobierno de España pretende restringir el uso de los cigarrillos electrónicos o vapeadores, ya que «provocan efectos nocivos a corto plazo».

Fernando Fernández Bueno, cirujano oncológico del Hospital Gómez Ulla y miembro de la Plataforma por la Reducción del Daño por Tabaquismo explica a El Confidencial que «el vapeo es un 95 % menos dañino que el tabaco tradicional, porque los vaporizadores no emiten los carcinógenos del tabaco», además argumenta al periódico que «todavía hay quien dice que vapear es peor que fumar. Peor que fumar no hay nada». 

Según afirma Sanidad, no existe un control claro ni efectivo ante estos dispositivos de liberación de nicotina. La mayor preocupación del Gobierno es que estos aparatos puedan «fomentar la experimentación e inicio en jóvenes y no fumadores». Además, aseguran que los jóvenes podrían empezar a aficionarse debido a los colores de los vapeadores o a los sabores de las sustancias. 

Prohibir la venta online

El Ministerio de Salud, dirigido por Carolina Darias, se muestra muy preocupado por la venta de estos aparatos que producen un intenso humo blanco, y explica que: «Existe una gran disponibilidad de páginas de venta online de dispositivos susceptibles de liberación de nicotina y las medidas disuasorias del acceso a menores no parecen suficientes ni efectivas». 

Por lo tanto, el Gobierno quiere eliminar la venta en cualquier tipo de página online. Según ha confirmado, su objetivo es apoyar la venta, solo, en expendedurías de tabaco y tiendas especializadas.

Además, han advertido de que las nuevas medidas que quieren adoptar tendrán repercusión en el precio de los cigarrillos electrónicos.

Estudio

La revista científica American Journal of Physiology publicó un estudio en el que se mostraba que el cigarrillo es aún más perjudicial que el tabaco. Para ello, crearon cuatro grupos de ratones, cada uno de ellos expuestos a un ambiente distinto.

El primer grupo estaba expuesto al tabaco tradicional; el segundo al vapor de propilenglicol y glicerol vegetal, los ingredientes más usados en este tipo de cigarrillos; el tercero al de glicerol vegetal; y el cuarto al vapor con propilenglicol, nicotina y un saborizante de tabaco.

A los tres días de finalizar la prueba, los científicos comprobaron que los ratones que habían estado expuestos al vapor tenían más mucosa y la función pulmonar dañada.

No obstante, los consumidores de vapeo aseguran que pueden respirar mucho mejor y practican deporte con mucha más resistencia. 

Según los científicos aún no hay estudios científicos claros y sólidos que hablen de este ámbito de manera más detallada, por lo que, de momento, tendrán que seguir estudiando este ámbito y los daños que produce.