Este inesperado producto masculino es lo más robado del supermercado

Los hurtos en las grandes y pequeñas superficies cada vez son más comunes. Al año estas acciones suponen pérdidas de un 1 % en ventas, lo que se refleja en una pérdida de 1.800 millones de euros por robos, según los datos que ha publicado la Asociación de fabricantes y distribuidores (Aecoc).

Hasta noviembre de 2021 se contabilizaron aproximadamente 30.000 actos delictivos de estas condiciones, según datos policiales que se mostraron en el 24º congreso de la Aecoc. Los datos aún no están claros, pero se prevé que las cifras se asimilen a las del año 2020, cuando hubo casi 33.500 hurtos.

Pero ¿cuáles son los productos que más se robaron en los establecimientos de alimentación el año pasado? La empresa STC Nedap Chromiu, especializada en elementos de seguridad para combatir este tipo de hurtos, ha elaborado un listado.

• Bebidas alcohólicas. Estos productos llevan varios años en la cima. Se hurtan bebidas alcohólicas de todo tipo, desde ginebras y cervezas más baratas, hasta los whiskys y vinos espumosos más caros. El pico más elevado se da siempre durante las fiestas navideñas. Su alto precio por unidad y la facilidad para la reventa los hacen muy apetecibles para los ladrones. No obstante también se debe al alcoholismo, ya que es una enfermedad que puede incitar al robo de estas bebidas.
• Ibéricos y curados. El segundo artículo más deseado por los ladrones son los productos ibéricos y curados. Entre los que más se roban hay sobres de jamón y lomo ibérico, trozos o piezas completas de queso e incluso jamones enteros. Además de los hurtos, también es habitual intercambiar etiquetas con productos más económicos para pagar menos cuando se pasa por caja.

• Productos de afeitar. Los artículos de afeitar están en tercera posición. Los más comunes son los recambios de las hojas de afeitar, tanto masculinas como femeninas. «Su tamaño pequeño, junto con su alto valor y demanda, favorece un hurto masivo para después poder revenderlas», asegura STC Nedap Chromium.

• Chocolate. A los autores de los hurtos también les gustan los dulces, porque en cuarta posición está el chocolate. Aquí los robos no se concentran en un artículo determinado, sino que desaparecen de las estanterías chocolates de todo tipo y gustos. Por Navidad se incrementa el hurto de determinadas barras de turrones de alta calidad.

• Cápsulas de café. Los robos de cápsulas han crecido tan rápido como la irrupción de este tipo de producto en los supermercados. Las que antes desaparecen, también sobre todo durante las fiestas de Navidad, son las de marcas de fabricantes.

• Pilas y cuidado personal. Es la primera vez que los helados aparecen en el top ten de la lista de artículos más robados de STC Nedap Chromium, y lo hacen en la sexta posición. El motivo es que han dejado de ser un producto de consumo estacional. Igual que las bebidas alcohólicas, son productos que una vez robados se acostumbran a revender. En cuanto a las conservas selectas, que son las séptimas más hurtadas, las que más desaparecen son los berberechos, el atún y las anchoas. «Son productos caros, pequeños y fáciles de esconder», apuntan desde STC Nedap Chromium.

¿Cuál es el perfil de los ladrones?

Los ladrones de los supermercados tienen un perfil muy específico. Suelen ser personas que pasan muy desapercibidas y asisten a los comercios a las horas puntas y solas. Además, nunca miran a los vigilantes y tiene un comportamiento moderado y normal. 

En muchos casos los vigilantes de los grandes comercios ya conocen a las personas que realizan hurtos, pero debido a la cantidad de dinero mínima que llevan no pueden hacen gran cosa al respecto. Si el producto robado vale menos de 400 euros se comete una falta, pero no se hace nada al respecto. En cambio, si lo sustraído vale más de 400 euros o hay violencia se trata de un delito.

Si el valor del objeto hurtado supera los 400 euros estaremos frente a un delito de hurto castigado en el artículo 234 del Código Penal con pena de prisión de 6 a 18 meses.

Si en el delito de hurto concurre alguna de las circunstancias del artículo 235 del Código Penal, la pena a imponer irá de uno a tres años de prisión. 

En cambio, si el valor de lo hurtado, por pequeña que sea la cantidad, no supera los 400 euros estaremos frente a un delito leve de hurto que está penado con multa de uno a tres meses.