El lenguaje no verbal de Putin: «No tiene miedo a la muerte, sino a no pasar a la historia»

¿Qué se esconde bajo el verdadero Vladímir Putin? El presidente ruso siempre ha llamado la atención por su actitud imperturbable ante cualquier acontecimiento, ya fuese alegro o no; sus mirad reptiliana; su posición ante las personas; su tímida sonrisa y la colocación de sus brazos y manos.

El 24 de febrero Putin, con una mirada desafiante, una mueca seria y las manos sobre la mesa, declaró la guerra a Ucrania.

Aquí el mandatario posiciona las manos sobre la mesa para ocupar más espacio, para mostrar poder, credibilidad y sobre todo, seguridad. «Es un personaje que muestra mucho autocontrol a la par que poca expresividad», declara Javier Urra, psicólogo forense en la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia y Juzgados de Menores de Madrid.

«Las personas que han estado con él explican que es frío y tiene una mirada reptiliana, no se le nota la sensibilidad humana y perfil psicopático, pero no es un loco, él sabe perfectamente lo que hace», comenta Urra.

El psicólogo ha estudiado cada una de las expresiones y gestos de Putin y cree que es una «persona peligrosa, narcisista que no aguanta a los débiles». Además, según apunta Urra, hay un problema que le alza más la segura: «Los rusos lo ven como un gran salvador, y en realidad es un hombre al que hay que temer y darle una salida de honor para que esto termine».

En diversas ocasiones el dirigente ha aparecido en imágenes sin camiseta, jugando con perros o haciendo deporte. «Esto es un signo de una persona prepotente, con carencias en su infancia –que sería importante analizarla–, y tiene la necesidad de demostrar al mundo su capacidad», agrega el psicólogo forense.

Además, Putin es un gran fanático de los perros. En diversas ocasiones se ha visto al ex miembro de la KGB jugando (y sonriendo) con ellos. «Putin se lleva bien con los perros porque puede dominarles con facilidad y de manera muy estricta», opina Urra.

La forma de caminar del actual presidente de Rusia también demuestra parte de su personalidad: «Cuando camina por los pasillos va altivo, muestra autoridad y poder», analiza Urra.

¿Putin sabe que le pueden matar?

El ministro de Exteriores de Luxemburgo, Jean Asselborn, ha asegurado que, mientras Vladimir Putin siga como presidente de Rusia, «no puede haber solución» al conflicto en Ucrania, por lo que ha deslizado incluso la posibilidad de una «eliminación física». Pero, ¿realmente al mandatario le importa morir?

«La realidad es que Putin no tiene miedo a la muerte, sino a no pasar a la historia como hizo Hitler. Hoy todo el mundo sabe de él», recalca el psicólogo forense.

La postura del presidente está clara, y él en ningún momento «va a recular». Una de las palabras primordiales para que la guerra terminase sería «negociación», pero «la entiende desde el dominio, por lo que se podría decir que la línea documental es igual a la de Hitler, cree que las víctimas son ellos, no saben el daño que están causando a la población», afirma Urra.

La opinión del psicólogo es muy clara con respecto a lo que hay que hacerle al dirigente ruso: «Tienen que intentar humillarle, hundirle el poder que tiene», concluye el experto.