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Testimonio

La angustia de los chinos ante la covid: «No sabemos la verdad y no podemos comprar medicinas»

Impera la desinformación y las familias de los fallecidos esperan alrededor de tres días a que recojan el cuerpo y lo lleven a incinerar

«Nosotros en China ya no vemos noticias del coronavirus, no sabemos cuál es mejor o cuál es verdad». El lunes pasado, Blanca Zhao acudió a uno de los hospitales públicos de Pekín. Al llegar vio más ambulancias de la cuenta en la entrada y como tenía consulta médica tuvo que entrar. «Las salas estaban llenas de gente, no entraba nadie más», explica a este medio. La asistencia de Blanca al centro de salud fue diaria, por lo que se dio cuenta de que «poco a poco las salas se comenzaron a vaciar». La situación de Pekín poco a poco iba mejorando.

La mejora sanitaria de la capital también se fue viendo en las carreteras. «Aquí en la capital no podían salir todos los coches a la vez. Estábamos encerrados en casa, no íbamos ni a trabajar», explica la ciudadana china. Ahora, a medida que pasan los días, Pekín va recobrando la vida que enterró en 2019 el coronavirus.

Las últimas horas del 27 de noviembre fueron críticas para los ciudadanos. La gente salió a las calles a protestar contra el Gobierno por la estricta política «cero covid» que estaban obligados a cumplir. Blanca, que reportó desde China la situación a El Debate explicó desesperada que estaban sin dormir: «No sabemos qué pasará, pero pinta muy mal. No podemos más, estamos muy cansados de esto». Días después, el presidente, Xi Jinping, anunció la retirada de las restricciones y con ellas el aumento de contagios se disparó.

Las autoridades sanitarias alertan de una nueva cepa. Según nos están diciendo provoca colitis y es muy transmisible y mortalBlanca ZhaoCiudadana de Pekín

Ahora, las alarmas han saltado por una nueva subvariante de ómicron, la XBB.1.5. «Las autoridades sanitarias de China alertan de una nueva cepa, la XBB.1.5. Por lo visto, según nos están diciendo, provoca colitis y es muy transmisible y mortal», asegura. Estos son datos que, contrastados con los de Europa o el resto del mundo, no coinciden. El doctor Marcos López Hoyos, presidente de la Sociedad Española de Inmunología, detalló en una entrevista a este medio que el virus «no busca crear una enfermedad grave, porque si mata a su huésped no tiene donde sobrevivir, por ello el virus tiende a mutar hacia cepas más leves».

Pekín se ha convertido en una excepción del marco asiático, Taiwán y Shanghái están viviendo una situación extrema: «De los 500 taiwaneses que están volviendo a sus casas para pasar estas fechas con sus familias, al menos 170 infectados con la nueva subvariante del virus», aclara Blanca Zhao.

Las farmacias completamente vacías

Salir a la calle en Pekín en busca de medicinas se está convirtiendo en un auténtico reto. «En Pekín estamos intentando comprar medicinas para la colitis, pero no podemos. No sabemos ni entendemos qué está pasando», expresa la ciudadana.

A pesar de esta extrema situación sanitaria están callados, no pueden hacer nada. «El año pasado fue tan malo para nosotros que lo que necesitamos es trabajar y ganar dinero. Enseguida viene nuestra Fiesta de Primavera, la más importante para nosotros, y todo el mundo va a estar de vacaciones. La gente está trabajando fuera durante todo el año para ganar dinero y llegar a casa con él», expone Blanca Zhao.

Muertes y contagios, ¿reales?

Tras el abandono de la política «cero covid» los contagios y muertes se comenzaron a multiplicar, pero el Gobierno comunista decidió ocultar la realidad de muertes y contagios a pesar del gran colapso del sistema sanitario y del trabajo sin descanso de los crematorios. «En Pekín han muerto muchas personas, sobre todo mayores».

La verdadera angustia la viven las familias de los fallecidos que esperan alrededor de tres días a que recojan el cuerpo y lo lleven a incinerar. «Está todo lleno. Está pasando lo mismo que en la India hace unos años», comenta la residente en Pekín.

El número de contagios y muertes que ofrece el Gobierno es mentiraBlanca ZhaoCiudadana de Pekín

En una de sus visitas al hospital, una mujer le comentó a Blanca la situación que estaban viviendo: «Se había muerto la madre de una amiga suya en casa y como en Pekín no se pueden quemar más cuerpos, tienen el cadáver en casa hasta poder desplazarlo a su pueblo, por ello han tenido que pagar mucho dinero».

El alivio de las medidas de Pekín puso fin al régimen de «cero covid» con pruebas masivas, confinamientos y extensas cuarentenas que paralizaron su economía y provocaron protestas a lo largo del país.

«El actual desarrollo de la situación epidemiológica china es predecible y controlada», aseguró el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Wang Wenbin. A pesar de estas declaraciones, los ciudadanos saben la verdad: «El número de contagios y muertes que ofrece el Gobierno es mentira. En Pekín aproximadamente el 80 % de los ciudadanos se ha contagiado», denuncia Blanca.

No me voy a poner la cuarta dosis, no me fío mucho de estas vacunasBlanca ZhaoCiudadana de Pekín

La subdirectora de Exteriores, Mao Ning, en rueda de prensa también quiso apoyar la política y la situación del país: «China ha estado compartiendo información y datos sobre la covid de forma responsable. La comunidad internacional debe evitar politizar la pandemia».

Una cuarta dosis de vacuna nada clara

Blanca ha recibido las tres dosis del suero chino, ARCoVax y Sinovac, pero no es suficiente, ahora, deben ponerse la cuarta: «Nos han dicho que es la de refuerzo y nos sirve para respirar, pero yo no me la voy a poner, no me fío mucho de estas vacunas. No nos han servido para nada», apunta.

Ahora en Shanghái parece que la situación se ha vuelto más grave que en Pekín. «Aquí casi todos, por lo que parece, hemos cogido covid y la cosa se va calmando, tenemos miedo a coger la subvariante XBB.1.5, todo el mundo está hablando de ella porque el Gobierno dice que es más contagiosa y causa más muertes, pero no sabemos nada».

Las noticias del Gobierno no dicen nada, explican que todo está bien, pero parece que no es asíBlanca ZhaoCiudadana de Pekín

«Las noticias del Gobierno no dicen nada, explican que todo está bien, pero parece que no es así. En el discurso de Año Nuevo, el presidente dijo que estábamos entrando en una nueva etapa de la covid. 2022 ha sido un año donde han convertido China en un mundo que no conozco»; concluye Blanca Zhao.