La lucha por la vida
Así de alarmante es el uso de la píldora abortiva en Cataluña o Baleares, mientras que en Madrid es marginal
El abuso de la mifepristona, que puede acabar prohibida en Estados Unidos, está disparado en regiones como Cantabria y Navarra, además de la catalana y la balear
El uso –o en según qué casos, abuso– de la píldora abortiva en España, la mifepristona, tan de actualidad en Estados Unidos, presenta un mapa muy desigual, con unas cifras tan inauditas como alarmantes en regiones como Cantabria, Navarra, Cataluña y Baleares.
Así, las cuatro comunidades citadas lideran el uso de este medicamento, que es el mismo que ha provocado una especie de revuelta judicial en todo Estados Unidos.
Baleares lidera holgadamente esta controvertida clasificación: en la comunidad balear, el 70,27 % de las mujeres que recurrieron al aborto lo hicieron por vía farmacológica. Después viene Cantabria, que informó de un 66,31 % de abortos ejecutados mediante la mifepristona. Cataluña y Navarra también presentan cifras por encima del 50 %.
Según datos del Ministerio de Sanidad que recoge El Español, el 24 % de los abortos realizados en España en 2020 utilizaron la vía farmacológica. En Extremadura, solo el 0,33 % de las intervenciones fueron farmacológicas, en Madrid, el 1, 58%, en Canarias, el 2,15 %.
Terremoto en Estados Unidos
Tras un dictamen calificado de histórico, el país norteamericano se dirige hacia la total prohibición de este medicamento.
Esa es al menos la opinión del juez del tribunal de Amarillo (Texas), Mattew Kacsmaryk, que aboga por la supresión del uso de la mifepristona.
El informe del magistrado, al que activistas proaborto y políticos y diarios progresistas acusan de ser «un ultraconservador», consta de 67 páginas, y su resolución, se sospecha, puede acabar provocando un terremoto semejante al de la decisión del Tribunal Supremo, cuando tumbó Roe contra Wade.
Y es que Kacsmaryk opina que la aprobación por parte de la agencia del medicamento estadounidense, la FDA, viola normas federales.
El Gobierno demócrata encajó mal el dictamen del magistrado. El presidente estadounidense, Joe Biden, se declaró «decidido a combatir» esta decisión.
Paralelamente, el juez Thomas O. Rice ordenaba desde el estado de Washington que se mantenga el suministro del fármaco en los 17 Estados que lo han solicitado, todos ellos bajo control demócrata. Se trata de Washington, Oregon, Arizona, Colorado, Connecticut, Delaware, Illinois, Nuevo México, Rhode Island, Vermont, Hawái, Maine, Maryland y Minnesota. Además de Washington DC y Michigan.
Y es que la batalla legal iniciada por el magistrado texano, tras una demanda de una plataforma antiabortista, para paralizar el acceso al aborto farmacológico, cuestiona a su vez la validez estatal de las decisiones de la Agencia Estadounidense del Medicamento (FDA).