El 90% de los cánceres gástricos más frecuentes se pueden detectar gracias a dos avances en la medicina

El 90 % de los cánceres gástricos más frecuentes se pueden detectar correctamente gracias a los avances en técnicas como la gastroscopia y la cromoendoscopia (un procedimiento que permite evaluar con mayor claridad las lesiones en el tracto digestivo). Los avances en estas pruebas diagnósticas, ahora más precisas y ágiles, han repercutido en la calidad de la detección de estos cánceres gástricos.

Esta será una de las principales conclusiones que abordará el doctor Joaquín Rodríguez, experto de la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD) y especialista en Aparato Digestivo en el Hospital Universitario 12 de Octubre (Madrid), durante su ponencia Lesiones precancerosas gástricas, dentro de la mesa sobre tracto digestivo que tendrá lugar durante el LXXXII Congreso de la SEPD, del 8 al 10 de junio en Sevilla.

Esta charla, según apunta, servirá para «poner en valor estas técnicas de gran utilidad para el diagnóstico», ya que hasta el momento, no se le ha dado la importancia que merece «desde el punto de vista de la calidad frente a otros procedimientos» como, por ejemplo, la colonoscopia. Por ello, en esta ponencia se facilitarán una serie de recomendaciones para detectar las lesiones precancerosas gástricas a través de estas pruebas diagnósticas.

Qué es y tipología

El cáncer estómago es un tipo de neoplasia que se origina en esta parte del aparato digestivo y, por lo general, puede ser de dos tipos: intestinal (el más frecuente, ya que ocurre en el 90 % de los casos) y difuso (solo se produce en el 10 % de los casos).

El cáncer gástrico de tipo intestinal se caracteriza por su secuencia anatómica desde que surge hasta que se termina desarrollando el tumor. «El cáncer gástrico de tipo intestinal es lineal y puede estar originado por la infección por el Helicobacter pylori», asevera el experto. Además, en algunos casos, apunta, esta infección puede derivar primero en gastritis atrófica y, posteriormente, puede generar metaplasia intestinal, displasia y, finalmente, cáncer.

A pesar de que el cáncer aparece y no avisa, se puede prevenir y tratar gracias a los avances en las pruebas diagnósticas.

Por su parte, el cáncer gástrico difuso se caracteriza por provenir de un componente genético (cáncer gástrico hereditario difuso) o esporádico (como ocurre en la mayoría de los casos de cáncer). Y suele tener mal pronóstico, ya que es difícil de detectarlo de forma precoz y, cuando se hace, suele estar muy avanzado.

Las cifras del cáncer digestivo en España

Uno de cada cuatro (25 %) tumores que se diagnosticarán con más frecuencia en España en 2023 estarán relacionados con el aparato digestivo, según las estimaciones publicadas en el informe Las cifras del cáncer en España. En concreto, de los 279.260 nuevos casos de cánceres que se diagnosticarán este año, 70.578 serán digestivos.

La mayoría de los tumores digestivos diagnosticados serán colorrectales (42.721), seguidos a cierta distancia por el páncreas (9.280), estómago (6.932), hígado (6.695), vesícula biliar (2.648) y esófago (2.302).

En el caso del cáncer gástrico, y tal y como resalta el doctor Rodríguez, no es demasiado prevalente en nuestro país (supone cerca el 10 % del total de casos relacionados con los tumores digestivos detectados) debido a los hábitos nutricionales y otros factores pocos conocidos como la predisposición genética. Es curioso porque esta circunstancia «no se da en países como Portugal, donde el cáncer gástrico es significativamente más frecuente».

No obstante, la mejora en la formación de los profesionales ha influido en un mejor diagnóstico precoz de esta enfermedad, asevera el experto. Ahora, los especialistas en Digestivo son «capaces de diagnosticar este tipo de cáncer antes y eliminar las lesiones entre los pacientes».