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16 de septiembre de 2024

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Productos de limpiezaGTRES

Estos son los productos de limpieza que nunca deberías mezclar: podrías intoxicarte

El hecho de combinarlos puede traer consigo numerosas consecuencias, siendo la lejía uno de los que más peligros supone

A la hora de limpiar nuestro hogar, siempre buscamos hacerlo con la intención de higienizar o desinfectar y que el resultado sea el mejor posible. Para poder llevar esto a cabo, el mercado ofrece una gran multitud de productos de limpieza gracias a los cuales se pueden eliminar casi cualquier tipo de suciedad, limpiando así todas las superficies.

Gracias a los avances y al desarrollo de la ciencia y la tecnología, cada vez se crean productos más completos con fórmulas que se mejoran. El objetivo de estos cambios es cumplir con las expectativas y necesidades de los consumidores. Aun así, son muchas las personas que no les basta con usar solo un producto y mezclan varios, una práctica que puede llegar a ser peligrosa para la salud.

Este peligro es más propenso cuando combinamos productos de limpieza específicos que suelen estar en todos los armarios y despensas de nuestro país. Aunque existen cientos de componentes químicos en las fórmulas de estos productos que se utilizan con frecuencia, hay una serie de mezclas que son muy habituales.

Productos que nunca debes mezclar

Una de las más peligrosas que se pueden dar es la de la lejía con el amoniaco, ya que si se combinan ambos desinfectantes, se producirá una reacción de la que emana un gas de cloramina que es tóxico al inhalarse y puede producir graves daños en las vías respiratorias y en los ojos.

Otra de ellas, que implica nuevamente a la lejía, sería la de este producto con el vinagre, ya sea de limpieza o de cocina. El resultado de esta fusión también desprenderá un gas, esta vez de cloro, cuyos efectos son similares al anterior, amenazando mucosas, garganta, boca y ojos.

Algo parecido puede ocurrir al combinar lejía con alcohol, ya que se liberan unos vapores de cloroformo y ácido clorhídrico que pueden producir daños en la piel, ojos, pulmones, riñones, hígado y sistema nervioso. El cloroformo tiene efectos como mareos, perdida de consciencia, vómitos e incluso, en casos muy extremos, la muerte.

Algo que se puede observar, es que la lejía es un producto peligroso al combinarlo con otros. Casi siempre supone alguna reacción química dañina para la salud. En este sentido, al combinarla con agua caliente, también emana vapores de cloro que trae consigo las consecuencias mencionadas anteriormente.

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