Desvelada la identidad de Jack el Destripador por unos registros médicos

Fue uno de los asesinos más sanguinarios de la historia de Europa y aterrorizó al Reino Unido durante el siglo XIX. Al hombre, hasta ahora sin identificar, se le atribuyen al menos cinco homicidios en el barrio londinense de Whitechapel, cuyo modus operandi estuvo caracterizado por cortes en la garganta, mutilaciones en el área genital y abdominal, extirpación de órganos y desfiguración del rostro de sus víctimas.

Ahora, 135 años después de los terribles crímenes, una antigua voluntaria de la policía y tataranieta de uno de los agentes que participó en la investigación ha desenterrado pruebas convincentes que coinciden con las descripciones de los testigos del hombre visto con víctimas femeninas poco antes de que fueran asesinadas a puñaladas en 1888.

Se trata de Sarah Bax Horton, cuyo trabajo de detective la ha llevado hasta Hyam Hyams, tal y como relata The Telegraph. Este vivía en una zona en el centro de los asesinatos y, como tabaquero, sabía usar un cuchillo. Era un epiléptico y alcohólico y entraba y salía de centros de salud mental. Agredió repetidamente a su esposa, paranoico de que ella lo estuviera engañando, y finalmente fue arrestado después de que la atacara a ella y a su madre con «una picadora».

Bax Horton tuvo acceso a su historial médico y descubrió detalles dramáticos. «Por primera vez en la historia, Jack el Destripador puede ser identificado como Hyam Hyams utilizando características físicas distintivas», comentó a The Telegraph.

Y es que los testigos de la época describían al Destripador como un hombre de unos 30 años, con un brazo rígido y un andar irregular con las rodillas dobladas. Unas características que, según Bax Horton, Hyams –que tenía 35 años en 1888– poseía, ya que había sufrido una lesión que le impedía mover el brazo izquierdo y padecía problemas en las piernas que hacían que no caminase bien.

Las notas médicas de Hyams, tomadas en varios centros médicos, revelan que su deterioro mental y físico coincidió con el periodo de asesinatos del Destripador, intensificándose entre su rotura del brazo izquierdo en febrero de 1888 y su internamiento permanente en septiembre de 1889. «Era especialmente violento después de sus graves ataques epilépticos, lo que explica la periodicidad de los asesinatos», explica Bax Horton.

La investigadora ha llegado a la conclusión de que el deterioro físico y mental de Hyams, agravado por su alcoholismo, le impulsó a matar. Los asesinatos cesaron a finales de 1888, más o menos cuando Hyams fue detenido por la policía por ser «un lunático errante». En 1889 fue encarcelado en el manicomio de Colney Hatch, al norte de Londres, hasta su muerte en 1913. Jack el Destripador nunca volvió a atacar.

Sarah Bax Horton presentará todas sus pruebas en un libro titulado One-Armed Jack: Uncovering the Real Jack the Ripper (Jack de un solo brazo: descubriendo al verdadero Jack el Destripador). Está escrito, según explica, en homenaje a su tatarabuelo y a sus colegas policías.

Paul Begg, una de las principales autoridades en el tema del Destripador, lo ha respaldado. «Se trata de un libro bien documentado, bien escrito y necesario desde hace mucho tiempo para examinar a un posible sospechoso. Si tienes una idea del tipo de hombre que podría haber sido Jack el Destripador, Hyam Hyams podría serlo», dijo.