Descubren que durante las vacaciones de invierno aumenta el riesgo de sufrir un ataque cardíaco mortal
Los ataques cardíacos más graves ocurren los lunes que cualquier otro día del día de la semana
Las vacaciones de invierno, aunque son probablemente muy esperadas, pueden llegar a ser mortales. Según una investigación, es la época del año en la que más personas mueren ataques cardíacos, ya que la última semana de diciembre es la que más casos registra con respecto a cualquier otra semana de cualquier mes.
Si bien ser consciente de los signos de un ataque cardíaco y tomar medidas para reducir el riesgo es importante durante todo el año, la Asociación Estadounidense del Corazón, que ha publicado un análisis de varios estudios científicos que confirman este fenómeno mortal, recomienda celebrar las vacaciones sin excesos y usar ese tiempo en relajarse y cuidarse.
Johanna Contreras, voluntaria clínica de la American Heart Association (AHA) y cardióloga en Hospital Sinaí de Nueva York (EE.UU.), asegura que nadie quiere pensar en tragedias cuando estamos compartiendo fechas tan bonitas con familiares y amigos. Sin embargo, «estos hechos sorprendentes son muy aleccionadores». No comprenden muy bien qué desencadena este aumento de ataques cardíacos durante las vacaciones; probablemente sea «una combinación de factores», asegura.
Lo cierto es que se ha observado que el clima invernal aumenta el riesgo de ataque cardíaco debido al flujo sanguíneo restringido cuando las arterias pueden contraerse en temperaturas frías. También saben que las fiestas traen mucho estrés añadido a muchas personas. Hay muchas fiestas y reuniones familiares en las que «muchos tienden a abusar de comidas y bebidas ricas», afirma la experta, quien cree que uno de los factores más críticos podría ser que las personas ignoren importantes señales de advertencia de un ataque cardíaco o un derrame cerebral.
Si bien es posible que no desee pasar las fiestas en las urgencias de un médico o en el hospital, hacerse un chequeo y recibir «tratamiento rápido si hay algún problema», es uno de los mejores regalos que puede darse uno mismo y a sus seres queridos, recuerda.
El primer estudio analizado fue publicado en Circulation, la revista principal de la American Heart Association, que ha informado que se producen más muertes cardíacas el 25 de diciembre que cualquier otro día del año, seguido del 26 de diciembre y el 1 de enero.
Un segundo estudio, publicado en el British Medical Journal, que revisa más de 16 años de datos sobre ataques cardíacos entre personas en Suecia, muestra que hubo un aumento general del 15 por ciento en los ataques cardíacos durante las vacaciones de invierno. De particular interés, los ataques cardíacos aumentaron un 37 por ciento el 24 de diciembre, la noche de Nochebuena, alcanzando su punto máximo a las 10 de la tarde y con mayor frecuencia en personas mayores de 75 años y personas con diabetes o enfermedad cardiovascular previa.
El último estudio analizado, presentado en la reunión de la Sociedad Cardiovascular Británica en junio, respaldó investigaciones anteriores que encontraron que los ataques cardíacos más graves ocurren los lunes que cualquier otro día del día de la semana. Este año, el 25 de diciembre, que es el día de Navidad, cae en lunes.
¿Cómo se puede evitar?
Según recoge Europa Press, la AHA afirma que dar el regalo de la vida también puede entrar en juego si ve a alguien que sufre síntomas de un ataque cardíaco o un derrame cerebral. «Podría estar de compras en el centro comercial, disfrutar de las vistas y los sonidos de la temporada navideña o pasar tiempo en una reunión familiar y ser testigo de cómo alguien sufre un ataque cardíaco y sufre un paro cardíaco. Iniciar la RCP de inmediato y llamar al 9-1-1 podría marcar la diferencia entre la vida o la muerte en esas situaciones», afirman.
Contreras afirma que la RCP utilizando sólo las manos es algo que casi todo el mundo debe aprender y hacer, ya que la mayor parte de paros se dan fuera de un hospital y no se pueden atender con inmediatez. La experta también recuerda que en estas fechas de reuniones familiares es relevante hablar de la salud de cada individuo.
Muchos de los factores de salud que afectan las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares son hereditarios, por este motivo, si alguno de tus padres, hermanos o abuelos ha sufrido un ataque cardíaco o un derrame cerebral, «es probable que tú también corras un mayor riesgo». Pero la buena noticia es que puedes reducir el riesgo con medidas preventivas, por este motivo «conocer esa historia es un primer paso importante».
No obstante, recomiendan que antes de empezar las vacaciones de invierno se trate de conocer los síntomas para poder actuar en caso de que ocurra un ataque. Los signos de ataque cardíaco y síntomas de accidente cerebrovascular varían en hombres y mujeres y es fundamental reconocerlos temprano y llamar para pedir ayuda. Cuanto antes se comience el tratamiento médico, mayores serán las posibilidades de supervivencia y de prevenir daños cardíacos.
Por otro lado, aconseja celebra las fiestas con moderación. Comer saludablemente durante las fiestas no tiene por qué significar privarte, todavía hay maneras de comer inteligentemente y cuidar su consumo de sal. Además, aconseja tomarse un tiempo para cuidarse durante las vacaciones. Reducir el estrés de las interacciones familiares, las dificultades financieras, los horarios agitados y otros factores estresantes que prevalecen en esta época del año, incluido viajar. Además, no hay que olvidarse de tener algún tipo de actividad al menos 150 minutos por semana.