Mónica García quiere endurecer la ley antitabaco a la vez que pretende legalizar el cannabis

A principios de diciembre, el Ministerio de Sanidad anunció la que ha sido la primera polémica para su ministra, Mónica García: ampliar los espacios libres de humo. Entre sus prioridades no están los cuidados paliativos o la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), pero sí que se encuentra el plan antitabaco que Salvador Illa, exministro del departamento, publicó en 2021. Medida algo incongruente si se revisa el programa electoral de Más Madrid para el 28 de mayo, donde prometió dar luz verde al cannabis y limitar el tabaco sólo en las «áreas de socialización con niños y niñas».

En siete meses la médico y madre ha pasado de buscar la forma de dar luz verde al consumo de marihuana, que se suele consumir con tabaco, a seguir adelante con un proyecto que elimina su uso en los espacios públicos y privados.

La anestesista adelantó el pasado 11 de diciembre que entre sus prioridades está «sacar del cajón» esta práctica para prohibir el tabaco en las terrazas, las playas o los coches en presencia de menores y embarazadas. Este veto, según comunicó en un encuentro de medios junto con el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, no sólo afecta a los cigarros, sino que afecta a todos los derivados del tabaco como vapeadores.

Según proponía la líder de Más Madrid en su plan para ganar a Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid, si salía elegida iba a elevar al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud la necesidad de aprobar el Plan Integral de Control del Tabaco para incorporar elementos como la limitación de fumar en las áreas de socialización con niños y niñas. Medidas llamativas que no concuerdan con sus ideales ya que, aunque quiere prohibir el tabaco, anima a la libre venta y consumo de la marihuana.

Y es que, en el programa electoral, la ministra de Sanidad también apuesta por esta droga ilegal en España. Para adentrarla en nuestro país iban a pedir a Sanidad la «prestación del cannabis medicinal». Algo que, según su criterio, debería incluir formación «a los y las profesionales» prescriptores y desarrollo de los mecanismos de dispensación y farmacovigilancia inherentes a cualquier instrumento terapéutico.

Al hilo, la izquierda de García también apuesta por la regulación responsable de la marihuana en personas adultas con el objetivo de «proteger su salud y seguridad».

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, días después de la decisión de Sanidad, se pronunció al respecto, y pidió a García «coherencia», puesto que, según su criterio, si se está exagerando en la lucha contra el tabaco, «que se esté contra todas las drogas», porque estas sustancias sí que son un verdadero problema que están haciendo «verdaderos estragos entre todas las generaciones, pero especialmente los menores».