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Probabilidad, en tanto por ciento, de que la precipitación total entre las 00 y 24 horas sea superior o igual a 0,5 mmAemet

Estas zonas se verán afectadas por una masa de aire polar y temperaturas bajo cero el día de Reyes

Las heladas se convertirán en las protagonistas de la jornada y abarcarán buena parte del interior peninsular

El frío polar ya está en España. Después de semanas con tiempo estable y elevado para estas épocas del año, el 2024 comenzó con temperaturas frías, pero estabilizadas en la mayor parte de las comunidades autónomas. Galicia, la cordillera Cantábrica e Ibérica norte fueron la excepción, ya que amanecieron con lluvias y fuertes vientos.

Según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), este miércoles, debido a un frente frío atlántico que entró el pasado martes por Galicia, se producirán precipitaciones en buena parte del interior peninsular, pero no alcanzará, de momento, el área mediterránea. En los próximos días la situación meteorológica de España cambará, por lo que se espera un día de Reyes con valores bajo cero, heladas y nevadas en varios puntos.

En la jornada del 3 de enero se esperan ascensos en las temperaturas mínimas, salvo en el tercio noroeste. Las heladas perderán fuerza y se anotará un ligero ascenso en las máximas en el centro peninsular, valle del Ebro y litoral mediterráneo. En el caso de Canarias, predominarán cielos poco nubosos y vientos flojos. Habrá una mínima probabilidad de lluvias débiles en La Palma.

El jueves 4 y viernes 5 seguirá presente en la península el frente frío, por lo que se seguirán registrando lluvias en la mitad sur peninsular, más intensas en Andalucía occidental, menos probables en el extremo sureste.

Sin embargo, la Aemet asegura que a medida que vayan pasando las horas, entrará «un nuevo frente frío por el noroeste» acompañado de una «irrupción de aire polar» que dará lugar a precipitaciones en el tercio noroccidental durante el día 4. Esta situación meteorológica se extenderá el 5 al resto de la Península y Baleares.

Con la llegada del frío también bajará la cota de nieve, que pasará de 1400-1600 metros el 4 de enero a unos 800-1000 metros el día 5. Dicho descenso estará acompañado de «una disminución de las precipitaciones». En cuanto a las temperaturas, vivirán un descenso ambos días. Por lo tanto, volverán de nuevo las heladas a la meseta sur e Ibérica Sur.

En cuanto a los vientos, el jueves se localizarán en el suroeste y oeste. Sin embargo, el viernes rolarán al noroeste. Las zonas más afectadas por estas fuertes masas de aire serán las zonas del bajo Ebro, sudeste de la Ibérica y noroeste de Almería. En Canarias, afirma la Aemet, aunque hay incertidumbre, «no se descartan lluvias débiles en La Palma el jueves» que se podrían extender al resto de las islas más montañosas el viernes.

El día de Reyes y el 7 de enero vienen acompañados de un descenso generalizado de las temperaturas por la entrada de anticiclón en las islas Británicas y una borrasca en el mar Mediterráneo. Esta entrada progresiva del aire frío dará su vez paso a una masa de aire ártica por el norte peninsular que traerá un nuevo descenso de los mercurios, con mayor incertidumbre el domingo 7.

Al hilo, las heladas se convertirán en las protagonistas de la jornada y abarcarán buena parte del interior peninsular, con menor probabilidad en el valle del Ebro, del Guadiana y del Guadalquivir. En el caso de las precipitaciones se quedarán limitadas al Cantábrico y noreste de Baleares, con una cota de nieve próxima a los 800 metros en el norte y 1000 metros en Baleares.

Los vientos estarán presentes el día de Reyes en el componente oeste, pero el domingo 7 girarán al norte-noroeste y se intensificarán con probables rachas muy fuertes en el Pirineo, bajo Ebro, sudeste del sistema Ibérico y, con menor probabilidad, Baleares. Por el contrario, Canarias presentará una escasa probabilidad de lluvias débiles en las islas occidentales, con vientos del este y nordeste, flojos en general.