Solo el 61 % de españoles aprobarían el examen para obtener la nacionalidad

¿Son las pruebas para acceder a la nacionalidad española demasiado laxas? O, por el contrario, ¿son muy difíciles? Lo cierto es que la mayoría de la población desconoce en qué consiste el proceso para obtener la ciudadanía, pero los datos serían sorprendentes si fueran los propios españoles los que se sometieran a esas pruebas.

Según un estudio realizado por Remity, solo el 61 % de los españoles superarían este test. Aunque es una cifra baja, ocupa el cuarto lugar de los países analizados –que son los siete más populares para emigrar– junto a Francia, solo por detrás de Estados Unidos, Alemania y Australia.

Pese a que los pasos a seguir para obtener la nacionalidad dependen de cada país, la mayoría pasa por realizar un examen para medir el conocimiento, los valores y el compromiso de quienes desean ser reconocidos como ciudadanos. Estos suelen incluir pruebas sobre el dominio del idioma oficial, pero también en su historia o sus principales leyes y funcionamiento del Estado.

El estudio, realizado a 2.100 ciudadanos provenientes de los países más populares para emigrar (Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, Australia, Alemania, Francia y España), les ha puesto a prueba para saber si aprobarían ese examen para obtener su propia nacionalidad. Los resultados son dispares según el país en cuestión, pero interesantes de analizar.

Son los ciudadanos australianos los que, según el trabajo, tienen la mayor probabilidad de aprobar el examen de nacionalización de su propio país, ya que el 96 % de los participantes aprobaron la simulación de prueba al obtener una puntuación de 75 % o más.

En segunda posición se encuentra Alemania, donde el 95 % de los encuestados de ese país obtendrían la nacionalidad, seguido de Estados Unidos, con un porcentaje muy parecido, un 93 %.

En cuarta posición se sitúan España y Francia, con un 61 % de aprobados. Esto quiere decir que, si extrapolamos los datos a la población general, algo más de la mitad de los habitantes de nuestro país superarían el test para conseguir la nacionalidad española, mientras que casi un 40 % no la lograrían.

Por detrás de los españoles encontramos al Reino Unido, donde solo el 42 % de sus nacionales aprobarían, y a Canadá, en la que solo un pírrico 7 % de sus ciudadanos serían capaces de obtener la nacionalidad canadiense.

Si nos centramos en España de nuevo y observamos los datos de nuevos nacionalizados, en 2022 el número de personas que obtuvieron la nacionalidad española ascendió a las cifras más altas desde 2014, alcanzando las 181.581 personas. Un récord que fue superado un año después, ya que en 2023 la cantidad de residentes extranjeros que adquirió la nacionalidad española aumentó un 32,3 % hasta alcanzar las 240.208 personas.

Posibles preguntas

Para obtener la nacionalidad española es necesario aprobar dos exámenes: el CCSE (Conocimientos Constitucionales y Socioculturales de España) y el DELE A2, que también evalúa el conocimiento sobre la cultura y la sociedad española. Sin embargo, los ciudadanos de países hispanoamericanos están exentos del examen de idioma. Asimismo, aquellos que hayan estudiado en un instituto o colegio español no necesitan realizar el examen CCSE.

Los resultados dependen de la dificultad de las pruebas, pero también del nivel de conocimiento que posean los ciudadanos. Entre las preguntas que se plantean a quienes quieren acceder a la nacionalidad española se encuentran, por ejemplo, cuál es la forma de Estado de España, quién gestiona las competencias en Sanidad o de cuántas provincias consta el país. Unas cuestiones que pueden parecer fáciles pero que, por desgracia, muchos españoles no sabrían responder.

De las que se incluyen en el manual de preparación del Instituto Cervantes encontramos también otras más sencillas como «¿Qué comunidad autónoma es famosa por su aceite de oliva?» o «La sangría es una bebida con refrescos, vino y… a) fruta b) té c) agua».

Por tanto, en el caso de nuestro país se plantean a los aspirantes a conseguir la nacionalidad preguntas relacionadas con su geografía (pico más alto, número de provincias), su política (forma de Estado, administración, nombre del Rey), su historia (año de aprobación de la Constitución) o sus costumbres.

En cualquier caso, las cuestiones que recopila el Instituto Cervantes como posibles en el examen no son de un alto nivel. Simplemente con tener un poco de cultura general se pueden responder fácilmente. Por ello, sorprende que casi el 40 % de los encuestados no sean capaces de aprobarlo, y sugiere que el problema en la Educación de España es serio y de base.