La Guardia Civil ha investigado a una persona por un delito relativo a la flora, fauna y animales domésticos y otro contra la seguridad colectiva al poseer 32 animales potencialmente peligrosos en su vivienda en Telde (Gran Canaria). Entre los animales incautados se encontraban algunos potencialmente venenosos e invasores en las Islas Canarias, como tarántulas o escorpiones.

Las diferentes especies se encontraban en el domicilio particular de la persona investigada, en el interior de terrarios y varios envases de plástico, los cuales carecían de las mínimas medidas de seguridad que deben poseer este tipo de especímenes; en especial si nos referimos a las diferentes tarántulas y un escorpión, debido al potencial peligro que poseen estas especies.

El Seprona de la Guardia Civil tuvo conocimiento de que el investigado anunciaba en redes sociales la posibilidad de comprar determinados animales catalogados en el Convenio Internacional CITES y potencialmente peligrosos. Inmediatamente el Seprona inició una investigación debido al reclamo que existía en redes sociales, con la venta de estos especímenes protegidos y peligrosos.

El responsable de los animales admitió a los agentes de la Guardia Civil que era el propietario de diferentes tipos de animales, entre los que se encontraban especímenes protegidos, invasores y venenosos. Entre ellos, había especies de artrópodos como tarántulas, caracoles africanos y un escorpión extremadamente venenoso; reptiles como serpientes, lacértidos y tortugas, y otro tipo de animales e insectos considerados como invasores en Canarias como cucarachas argentinas, tenebrios, ranas arborícolas, una chinchilla y cuatro ejemplares de rata.