El Gobierno se desmarca del histórico desplome de la natalidad y lo atribuye a «decisiones personales»
Asegura que el motivo está enmarcado en «un ámbito decisor ajeno a la intervención de los poderes públicos»
En una encuesta del CIS publicada en octubre, el 77 % apuntó a la falta de medios económicos como el motivo por el que ahora se tienen menos hijos
El Gobierno considera que la causalidad del desplome de la natalidad en España no tiene nada que ver con la administración ni con los legisladores. Por el contrario, lo relaciona con un «cambio social» que «responde a decisiones personales» y que está enmarcado en «un ámbito decisor ajeno a la intervención de los poderes públicos».
Así lo manifiesta en una respuesta por escrito, recogida por Europa Press, a una pregunta registrada en el Congreso por el Grupo Parlamentario Vox. «El Gobierno considera que este cambio social responde a decisiones personales de los ciudadanos y que se sitúan en un ámbito decisor ajeno a la intervención de los poderes públicos», señala el Ejecutivo, que añade que es por ello que «la actuación del Gobierno tiene como objetivo garantizar la cohesión territorial y social, y asegurar una provisión de recursos y servicios equitativa y justa en todo el territorio, con independencia del lugar de residencia de los ciudadanos».
Para afianzar esta cohesión a la que alude, continúa, el Gobierno pone el foco en «la mejora de las condiciones de vida en las zonas en declive demográfico, aumentando las oportunidades en estos territorios, teniendo en cuenta medidas relacionadas con la igualdad de derechos entre mujeres y hombres y la intensificación de las medidas de conciliación y corresponsabilidad, junto a la consolidación y refuerzo de los servicios relacionados con la crianza», en el marco de sus competencias.
Con todo, y para tratar de explicar la actual caída histórica de la natalidad, el Gobierno sostiene que «los profundos cambios producidos en las últimas décadas en la estructura económica española han generado los inevitables cambios en la estructura social y, necesariamente, han modificado el comportamiento individual y colectivo de la población española, lo que ha afectado a las tasas de natalidad y fecundidad, que han experimentado sensibles descensos».
«Tendencia global»
También precisa «este proceso de cambio social no es exclusivo de España» y asegura que estudios de la OCDE, la Organización de las Naciones Unidas o el Banco Mundial ponen de relieve «la intensidad y coincidencia de estos cambios en los diferentes Estados; hasta el punto de que la tendencia se van extendiendo gradualmente a otras regiones geográficas conforme se va generalizando el desarrollo económico y se modifican las estructuras sociales conocidas durante décadas, con un relevante descenso del crecimiento natural de la población». Cabe destacar que, pese a la caída generalizada de la natalidad en Occidente, España se sitúa a la cabeza, y en 2023 fue el segundo país de la Unión Europea con menos nacimientos solo por detrás de Italia, según un estudio realizado por la escuela de negocios TBS Education-Barcelona. La tasa fue de 7,6 neonatos por cada 1.000 habitantes.
Ante esta situación, el Gobierno expone que, por parte del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, se está desplegando «una política transversal» para hacer frente al reto demográfico, que, «por una parte, apunta a distintos desafíos de carácter demográfico que deben abordarse de forma conjunta, como son la despoblación, los procesos de envejecimiento, la masculinización de determinadas zonas, las disparidades entre territorios o la evolución de la fecundidad».
Por otra parte, añade que este desafío «requiere de una respuesta en distintas dimensiones, que garantice en todo caso la igualdad de derechos y oportunidades de todas las personas, con especial atención a las mujeres y a colectivos que presenten mayor vulnerabilidad, como pueden ser los menores o las personas mayores».
Lo que dicen los españoles
Según una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicada el pasado 8 de octubre, el 77,3 % de los encuestados señalaba la falta de medios económicos como la principal causa que explica la caída de la natalidad, que se ha desplomado un 24 % en España en tan solo una década. El 44,1 % lo vinculaba a «problemas de conciliación de vida laboral y familiar», mientras que alrededor del 25 % creía que tenía que ver con otras causas, como «no entorpecer la carrera profesional», la «preocupación por el futuro» de esos potenciales hijos, la «gran responsabilidad» que supone tenerlos o por la falta de ayudas públicas.