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El Gobierno pretende imponer impuestos a los vapeadores por la nicotina

En 2022, la reforma fiscal incluyó entre sus propuestas una revisión del régimen tributario de los cigarrillos electrónicos, un tema que ya generaba debate

El Gobierno está trabajando en un proyecto de ley para aprobar el tipo mínimo global del 15 % a las multinacionales. Según ha revelado El País, entre las enmiendas que se está intentando introducir a la ley se plantea gravar los vapeadores para que tributen por la nicotina que algunos contienen.

En 2022, la reforma fiscal incluyó entre sus propuestas una revisión del régimen tributario de los cigarrillos electrónicos, un tema que ya generaba debate. A diferencia de los cigarrillos tradicionales, estos dispositivos, que en muchos casos contienen nicotina, no estaban gravados con el impuesto sobre labores del tabaco; solo se les aplicaba el IVA general. En ese mismo año, catorce países de la Unión Europea ya aplicaban algún tipo de impuesto específico a los cigarrillos electrónicos, destacando un enfoque impositivo que en España aún no se había implementado.

La propuesta del Ministerio de Sanidad español en ese entonces buscaba una equiparación del tratamiento fiscal entre los productos de vapeo con nicotina y el tabaco. Concretamente, sugería introducir un impuesto de 0,15 euros por cada mililitro de líquido de vapeo, en consonancia con la media europea, y establecer además un gravamen adicional de 0,006 euros por miligramo de nicotina en estos productos. Esta propuesta significaba una importante modificación para el mercado del vapeo en España, ya que con ella el tipo impositivo medio de los cigarrillos electrónicos alcanzaría el 35,6%, lo cual elevaba significativamente el coste para el consumidor, comparado con la situación anterior.

Por otro lado, el tabaco convencional en España se enfrenta a un régimen fiscal mucho más riguroso. En términos impositivos, los cigarrillos tradicionales están gravados con un tipo del 51 % sobre el precio de venta al público, además de un impuesto específico de 24,1 euros por cada 1.000 unidades. Esta estructura busca desincentivar el consumo de productos de tabaco debido a los efectos nocivos sobre la salud y los costes sanitarios asociados. La intención de armonizar la fiscalidad del vapeo con la del tabaco tradicional apunta a un objetivo similar: encarecer los productos de vapeo con nicotina y, así, reducir su consumo, especialmente entre los jóvenes, grupo demográfico que cada vez los usa con mayor frecuencia.

El vapeo podría producir cáncer de pulmón en 15 años

Según ha apuntado el oncólogo médico y el secretario científico del Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP), el doctor Bartomeu Masutti, el consumo de vapeadores podría producir cáncer de pulmón en 15 años, igual que ocurre con el tabaco convencional.

Por tanto, si los jóvenes empiezan a consumir cigarrillos electrónicos a los 15 años, podrían desarrollar un cáncer de pulmón a los 30-35 años. Aunque aún falta suficiente evidencia de este hecho, el doctor Masutti ha asegurado que «todo apunta a que sí». «El tiempo de observación es corto todavía, pero no hay ningún dato que diga que esto no va a suceder», ha señalado a los medios de comunicación durante la entrega de Premios TikTok GECP este martes.

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