Las autoridades de Tailandia recomiendan usar mascarillas por la alta contaminación del aire en Bangkok
Los niveles de partículas alcanzan cifras peligrosas, afectando la salud y la visibilidad en la ciudad
Este martes, Tailandia se vio cubierta por peligrosas partículas de PM2,5, las cuales tienen un diámetro de 2,5 micras o menos y son conocidas por ser altamente perjudiciales para la salud, llegando incluso a penetrar en la corriente sanguínea. En la mayoría de las ciudades del país, incluyendo Bangkok y sus áreas cercanas, los niveles de estas partículas superaron los límites sanitarios recomendados, alcanzando hasta 74,9 mcg/m3. Las autoridades tailandesas establecen un límite seguro de 37,5 mcg/m3, mientras que la Organización Mundial de la Salud aconseja evitar exposiciones prolongadas a concentraciones superiores a 25 mcg/m3 debido al riesgo de enfermedades respiratorias, cardiovasculares y cáncer.
Ante esta situación, las autoridades de Tailandia han recomendado a la población utilizar mascarillas y evitar actividades al aire libre para reducir la exposición a la elevada contaminación ambiental.
Durante la temporada seca, que va de noviembre a abril, los niveles de contaminación del aire en Tailandia y otros países del sudeste asiático tienden a empeorar debido a una combinación de factores. Entre ellos se encuentran las condiciones atmosféricas, las emisiones del transporte y las fábricas, y la quema de rastrojos en la agricultura, una práctica común en la región. Esta última se utiliza como un método económico para despejar la tierra antes de la siembra, aunque contribuye significativamente a la mala calidad del aire.
Las autoridades tailandesas han estado implementando medidas para combatir la contaminación del aire, particularmente en relación con la quema de rastrojos, que se lleva a cabo entre enero y abril. Aunque este método es más barato que el uso de maquinaria para retirar las plantas, su impacto negativo en la salud pública y el medio ambiente ha impulsado los esfuerzos para encontrar soluciones más sostenibles.