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Un ave entre residuos plásticosAFP

Las cinco islas de plástico que contaminan nuestros océanos: dónde están y cómo se forman

Millones de toneladas de basura se acumulan en nuestros océanos desde hace décadas en puntos que coinciden con los principales vórtices oceánicos

El plástico es un material que utilizamos cada día en una inmensa gama de productos y materiales. El principal problema reside en que los residuos que genera su uso colapsa los vertederos y los mares del planeta, y es que aunque el uso de este material aporte una serie de ventajas, es uno de los que más tiempo necesita para descomponerse, entre 100 y 1.000 años.

Por este motivo, las instituciones llevan tiempo intentando reducir su utilización con medidas como la prohibición de productos de plástico de un solo uso –como platos, cubiertos, pajitas y bastoncillos para los oídos–, que no se pueden comercializar desde 2021.

De igual forma, se han puesto en marcha otras posibles soluciones, como el cobro de bolsas de plástico en los supermercados o la inclusión de un impuesto al este material. Con todo ello se pretende frenar la producción de este material que ya está afectando de forma grave a los océanos mundiales, hasta el punto de que ya existen varias islas de plástico en los mares.

Microplásticos de menos de 5 mm.

La causa de esto son los 8.300 millones de toneladas de ese polímero que hemos puesto en circulación a nivel global, según datos de la Universidad de California. Unos restos que la humanidad lleva más de seis décadas vertiendo al mar y que proceden, mayormente, de tierra firme y del tráfico marino.

Según explica la energética Iberdrola en uno de sus apartados de sostenibilidad, las islas de basura que se ubican en el océano están formadas en su mayoría por microplásticos de menos de cinco milímetros que flotan en el interior de los giros oceánicos, por lo que hace que las cinco islas de plástico más grandes del mundo coincidan con los principales vórtices oceánicos.

Entre Hawái y California se encuentra la isla de basura del Pacífico Sur que, según la revista Nature, tiene 1,6 millones de kilómetros cuadrados o, traducido, tres veces el tamaño de Francia. Para comprender lo que tarda en degradarse el plástico, un dato: de 50 objetos analizados en busca de su fecha de producción, se encontró que uno era de 1977. En cambio, siete pertenecían a la década de los 80, 17 de los años 90, 24 de los 2000 y uno de la década siguiente.

Del mismo tamaño es la del Pacífico Norte, situado frente a las costas de Japón o Filipinas. Se estima que esta contiene 1,8 billones de plásticos y microplásticos y pesa alrededor de 80.000 toneladas.

En el Atlántico Norte se sitúa otra masa de plásticos y otros desperdicios cuya extensión de desconoce. Fue descubierta en 1972 y se encuentra frente a los países de Estados Unidos y México. Está impulsada por la corriente del Atlántico Norte y es conocida por su alta densidad de residuos, que es de hasta 200.000 por kilómetro cuadrado.

Más al sur, entre Río de Janeiro y Ciudad del Cabo, se sitúa la considerada isla de plástico más pequeña, la del Atlántico Sur. Esta consta de 0,7 kilómetros cuadrados, pero contiene aproximadamente 2.680 toneladas de plástico.

Por último, entre la relación de las islas más grandes del mundo encontramos la del Océano Índico. Tiene unas dimensiones de entre 2,1 y 5 kilómetros cuadrados y, según explican desde Iberdrola, sus desechos se han relacionado con la muerte de tortugas marinas y aves.

Para eliminar esta concentración de basura, las acciones son ya conocidas: principalmente reside en reducir el consumo de plásticos, aunque también es conveniente contribuir a la divulgación de este grave problema y alertar a las autoridades siempre que seamos testigos de una infracción relacionada con la gestión de estos productos.