La gestión de Ribera provoca que este verano haya una decena menos de medios aéreos de extinción de incendios

Empresas del sector de medios aéreos de extinción y emergencias han denunciado que el operativo de incendios del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) para este verano cuenta con una decena de medios aéreos de extinción de incendios menos, ya que los últimos contratos estatales habrían quedado desiertos. Las empresas consideran que las condiciones fijadas son «ruinosas» y los aboca a la quiebra, por lo que buscan mercado en otros países.

Fuentes del sector han precisado a Europa Press que las condiciones de las licitaciones del ministerio dirigido por la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, plantean precios inferiores a los de 2019 y no tienen en cuenta la inflación o la subida del precio del combustible, por lo que operar en esas condiciones les supondría hacerlo por debajo del precio de mercado.

Precisamente, el pasado 27 de junio, el Consejo de Ministros autorizó un contrato de emergencia para esta decena de medios aéreos para el verano de 2023 por un importe de 9 millones. En este sentido, el sector apunta que a pesar de que el Miteco llamó por teléfono a las empresas para informarles ninguna se presentó, por lo que el último de los contratos también habría quedado desierto hace poco más de diez días.

Estas empresas aéreas privadas operan en torno a 70 medios aéreos para el Estado y otros 200 para las comunidades autónomas. A estos se suman los 14 aviones Canadair que opera el 43 Grupo del Ejército del Aire. España cuenta con la mayor flota de aviones antincendios de Europa y, hasta ahora no tenía mucha demanda en el resto de Europa, porque los incendios se concentraban en España, Portugal, Italia y Grecia, pero en la actualidad también los sufren en Escandinavia.

La Asociación de Trabajos Aéreos y Emergencias (ATAIRE) ha alertado de esta «deriva» en una carta remitida al Ministerio para la Transición Ecológica el 3 de julio en la que piden una reunión con la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera. Y no es la primera vez que escriben a este departamento, puesto que el 24 de mayo también enviaron otra misiva en similares términos.

Desde la entidad afirman que el viernes pasado, 7 de julio, el Ministerio les contestó con una respuesta negativa a una cita con la ministra Ribera por cuestiones de agenda y les señaló que el asunto se pasaría a la Dirección General de Biodiversidad, Bosques y Diversificación. Una semana después, el colectivo asegura que sigue sin respuesta.

Contratos «imposibles»

Las cartas, a las que ha tenido acceso Europa Press, señalan que las condiciones de prestación que plantean las últimas licitaciones del Ministerio para la contratación de diez medios aéreos, «hace imposible en la mayoría de los casos la rentabilidad de los contratos», lo que, a su juicio, demuestra o bien un «absoluto desconocimiento» del servicio prestado y sus especiales características o bien un «interés en perjudicar la operación de las empresas».

Para las empresas que operan estos servicios, en cualquiera de los dos casos las bases de las licitaciones solo pueden llevar «a la ruina del sector» o bien la salida de empresas españolas a terceros países, donde les pagan «hasta un 70 por ciento más», con el consiguiente deterioro de la prestación de ayuda en la extinción del Miteco a las comunidades autónomas. Así, valoran que «cualquiera de las dos salidas es perjudicial» y alertan de que el operativo de extinción español podría quedar comprometido.

En las cartas, el colectivo analiza los impactos económicos sufridos por el sector y concluye que, en definitiva, les han supuesto una subida de costes «del orden de un 40 por ciento» sobre los precios de las licitaciones de 2018, 2019 o 2020.

Lamentan así que el órgano o el responsable de redactar los pliegos de contratación ha hecho «caso omiso» a sus argumentos y niegan pretender un lucro excesivo. «Nada más lejos de la realidad; ya en nuestra carta (de 24 de mayo) alertábamos del riesgo de no poder prestar el servicio durante 2023 por falta de recursos y liquidez», exponen.

Un representante del sector ha manifestado a Europa Press que no entienden esta «bajada clara» de las condiciones económicas de las licitaciones o que se mantengan las de 2019-2020 cuando «a nadie se le escapa la subida de precios» en los últimos años, 2021 y 2022, mientras el Ministerio ofrece precios «irrisorios».

En concreto, desde la asociación precisan que han quedado desiertas las licitaciones de cuatro aviones anfibio de tamaño pequeño o mediano para carga en agua, dos aviones de carga en tierra; tres helicópteros de tipo super-Puma y 1 helicóptero de tipo Bell412 que es un helicóptero mediano. Fuentes del Miteco responden que los contratos que se han quedado sin cubrir se han solventado con la aprobación de una contratación de emergencia, pero no precisa si se esta aprobación se ha producido alguna adjudicación.

Por otro lado, desde el sector reconocen que el Miteco está tratando de solucionar otro problema, el del repuesto de los helicópteros KAMOV, que son de fabricación rusa, dado que se ha establecido una prohibición de compra a empresas de ese país.

Al respecto, fuentes del Miteco apuntan a Europa Press que por las sanciones que la UE impone a Rusia por el conflicto con Ucrania, la disponibilidad de los KAMOV se ha reducido. Si anteriormente contrataba 8 de estos helicópteros, el año pasado fueron siete KAMOV y este se han reducido a tres, que se han ubicado estratégicamente en consonancia con el resto de medios aéreos y terrestres de lucha contra el fuego.

Desde el Ministerio admiten que para cubrir este déficit de helicópteros se ha tramitado una contratación de emergencia pero reconocen que el mercado está muy tensionado por la demanda de los países vecinos.

En todo caso, desde el Miteco aseguran que en su función de apoyo a las comunidades autónomas cumplirán como siempre con efectividad porque a pesar de esa circunstancia, el dispositivo del Miteco es muy potente y cualquier medio actúa allí donde es necesario, independientemente de su ubicación.

Desconocimiento o descoordinación

Desde ATAIRE muestran su sorpresa porque en un reciente evento de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea una alta directiva pidió en público al colectivo que solicitara una actualización del libro Blanco, para actualizar los costes de operación. «Esa fue nuestra sorpresa, puesto que ya lo habíamos hecho y hacen lo contrario», lamenta esta fuente.

En ese sentido, destacan que les consta que el Ministerio está interesado en mantener un operativo de extinción fuerte y trata de sustituir los Kamov rusos, pero ellos buscan trabajar sin perder dinero.

Buscarse el pan fuera

Mientras tanto, añaden que los servicios de los profesionales de extinción y las aeronaves españolas están siendo reclamadas desde otros países, como los nórdicos, que hasta ahora apenas tenían incendios, que ofrecen como mínimo en torno a un 40 por ciento más del precio que se paga en España e incluso hasta 70 por ciento más.

Desde ATAIRE, a la que están adheridas 15 empresas que dan trabajo a cerca de 4.000 personas, subrayan su compromiso con España pero reconocen que hay países que pagan hasta un 70 % más.

En este sentido, alertan de que al tiempo que otros países aumentan sus flotas de extinción, España cuenta en este momento con diez medios menos de los habituales en las pasadas campañas y que en la actualidad están en Turquía, Grecia y otros países que valoran la alta especialización de los pilotos españoles.

Por último, en la carta al Gobierno advierten del grave riesgo de que este sector pequeño pero muy especializado se marche a otros países europeos o del entorno internacional ya que en España está expuesta a desaparecer tal y como se conoce.

Por ello, señalan que en pleno mes de julio y en plena campaña de verano, si el Ministerio cambiara de condiciones sería ya «complicado» suplir estas aeronaves, ya que la mayoría están en el extranjero. «Se podría hacer algún esfuerzo para traer alguna».