La Agencia Europea de Medio Ambiente ve «difícil» que se cumplan los objetivos climáticos para 2030

La cumbre del clima (COP28) se cerró la semana pasada con un acuerdo que no fue nada fácil de alcanzar debido a las posiciones opuestas de los países exportadores de petróleo y aquellos que querían un abandono progresivo de los combustibles fósiles. Tras días de negociaciones, la reunión terminó por promover por primera vez que el mundo haga una «transición» para abandonar los hidrocarburos, además de triplicar la capacidad de energías renovables y duplicar la eficiencia energética media de aquí a 2030.

A esto hay que sumar los objetivos propios de los países miembros de la Unión Europea, que quieren reducir su consumo de energía hasta el equivalente de 992,5 millones de toneladas de petróleo y lograr una cuota del 42,5 % de energías renovables en el consumo global, entre otras medidas.

Unos objetivos que la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) ve demasiado halagüeños. En un informe publicado este lunes califican como «difícil» que los 27 miembros cumplan los objetivos medioambientales del bloque para 2030, sobre todo en lo relativo al consumo de energía y la agricultura biológica.

El organismo con sede en Copenhague considera que la UE podría no alcanzar la mayoría de sus objetivos para 2030 y que es «muy improbable» que logre reducir su consumo de energía hasta el nivel que se ha fijado. Para alcanzarlo ven necesario que el ritmo anual medio de reducción observado a lo largo de los diez últimos años sea «tres veces más rápido», algo complicado de ejecutar.

Pese a que en el Viejo Continente se ha apostado fuertemente por las energías renovables, la AEMA ve «poco probable» lograr una cuota del 42,5 % de energías renovables en el consumo global. Y esto a pesar de que algunos países como España conseguirán generar más del 50 % de la electricidad con energía renovable este año, según las previsiones de Rystad Energy.

Gases efecto invernadero

Pero no todas las conclusiones de la AEMA son un varapalo para los objetivos de la UE. La agencia cree que es «seguramente probable» que se alcance el objetivo de reducción del 55 % de las emisiones de gas de efecto invernadero para 2030, uno de los ejes del acuerdo de la COP28. No obstante, enfatizan que para acelerar los progresos, «los Estados miembros deben aplicar más las leyes existentes, tomar medidas suplementarias e integrar el clima y el medioambiente en otras áreas políticas».

En cuanto a la agricultura tampoco se muestra muy esperanzada, ya que según el texto es «muy improbable» que el 25 % de las tierras agrícolas sea cultivado según los criterios de la agricultura biológica. A pesar de los duros golpes de realidad, el organismo se queda con la buena noticia de que probablemente sí que se alcance el propósito de reducir en un 55 % el número de decesos prematuros relacionados con la contaminación del aire, ya que al cumplirse la merma de la emisión de gases de efecto invernadero la calidad del aire mejore en todo el continente.