Preocupación por la crecida el Ebro, que afectará a poblaciones como Logroño y Zaragoza
La crecida llegará a la capital aragonesa entre el viernes y el sábado con unos 1.600-2.000 metros cúbicos por segundo, según estimaciones de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE)
Las intensas y persistentes lluvias de estos días, especialmente en el norte peninsular, han provocado un crecimiento en el caudal de los ríos. En Navarra y País Vasco varias poblaciones e encuentran en alerta por el posible desbordamiento de estos ríos, a lo que ahora hay que sumarle una crecida importante del Ebro.
Varias localidades se encuentran en alerta por este aumento del caudal, entre las que se encuentran capitales como Logroño y Zaragoza. La crecida afectará a la capital riojana este miércoles y a la aragonesa entre el viernes y el sábado, con hasta 2.000 metros cúbicos por segundo.
El caudal del Ebro a su paso por Logroño ha alcanzado los 1.000-1.100 metros cúbicos por segundo (m3/s) a media tarde de este martes y se espera una nueva crecida del caudal durante la próxima madrugada, con una caudal que se estima que podría llegar a los 1.500-1.600 m3/s, se ha informado a EFE desde el Ayuntamiento.
La altura que ha alcanzado el cauce a última hora de la tarde es de unos 4,5 metros, que podría superar los 5 a primera hora del miércoles con la llegada de los desembalses de cabecera del Ebro, según los datos de que dispone el Ayuntamiento, de acuerdo con la información de Protección Civil, Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y la Agencia Estatal de Meteorología.
El Ayuntamiento de Logroño ha activado este martes un dispositivo especial de seguimiento y control ante el aumento del caudal del Ebro a su paso por la capital riojana, aunque no se prevé una avenida extraordinaria, sino normal por las lluvias registradas y los desembalses de los pantanos de Mansilla, en La Rioja, y de los de la zona de Burgos y Álava.
Así lo ha detallado a Efe el concejal de Interior, Francisco Iglesias, quien ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que se aleje de la ribera del Ebro y de zonas de pesca habitual y esparcimiento canino, como medidas de precaución ante posibles crecidas del río.
Ha indicado que los Servicios de Protección Civil del Ayuntamiento, Bomberos y Policía Local mantienen en todo momento controladas las zonas más susceptibles de anegarse y la recomendación a la ciudadanía es que si las ven acotadas, intenten alejarse y no traspasar las líneas, ha precisado.
SOS-Rioja también ha confirmado que este caudal máximo llegará a Logroño durante la próxima madrugada y ha indicado que dará lugar a algunas afecciones, que, por ejemplo, podría provocar el corte de las pistas en el aeropuerto de Agoncillo.
El viernes o el sábado a Zaragoza
La punta de la crecida del Ebro llegará a Zaragoza entre el viernes y el sábado, con caudales de entre 1.600 y 2.000 metros cúbicos por segundo, según estimaciones de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).
Desde el organismo de cuenca apuntan que el máximo de la crecida del Ebro se producirá en Miranda esta tarde con entre 600 y 700 m³/s; en Logroño durante la próxima noche con entre 1.000 y 1.200, y en Castejón-Tudela al final de mañana miércoles, con entre 2.000 y 2.400.
La CHE explica que las precipitaciones registradas en las últimas treinta horas en la cuenca están provocando crecidas extraordinarias en algunos afluentes de la margen izquierda del alto y medio Ebro, en Burgos, Álava y Navarra. En el tercio norte de la cuenca se han registrado precipitaciones superiores a los 50 litros por metro cuadrado, incluso superiores a los 100 en el extremo más septentrional.
Los mayores caudales en los afluentes de la margen izquierda entre el río Nela y el Aragón se esperan entre la tarde de este martes y la próxima madrugada, en algunos casos con avenidas extraordinarias. En todos los tramos del río Ebro el caudal tiene tendencia ascendente. En el tramo medio, el Ebro también puede alcanzar caudales extraordinarios con posibles afecciones en zonas aledañas al cauce.
Los embalses de Ullibarri y Urrúnaga en el País Vasco; Eugi, Alloz, Itoiz y Yesa en Navarra: Mansilla en La Rioja, y en el Sistema de Mequinenza, Ribarroja-Flix están siendo gestionados con el objetivo de reducir los caudales máximos aguas abajo.
La guardería fluvial está siguiendo con atención la evolución del episodio y los técnicos ya actúan en el área de Navarra, concretamente en incrementar la dimensión de un cordón de protección en la localidad de Funes construido en 2022 para minimizar los daños por la avenida.