El huracán Milton toca tierra en Florida causando destrucción y víctimas mortales por tornados previos
Después de tocar tierra la tormenta se ha debilitado a categoría 2, pero se insiste en que su impacto será significativo
El huracán Milton, considerado uno de los fenómenos más poderosos de la actual temporada, tocó tierra la noche de este miércoles en Siesta Key, cerca de la ciudad de Sarasota, en la costa oeste de Florida, con vientos máximos sostenidos de 205 kilómetros por hora (categoría 3). Este ciclón, que había alcanzado en dos ocasiones la temida categoría 5 mientras atravesaba el Golfo de México, impactó la zona turística de Siesta Key, famosa por sus playas de arena blanca y aguas prístinas, generando condiciones devastadoras en la región. Por el momento, al menos 12 personas han muerto y millones se han quedado sin electricidad mientras continúan los esfuerzos de limpieza.
Milton no solo trajo consigo vientos furiosos, sino también peligrosas marejadas ciclónicas, con pronósticos que advertían sobre un aumento del nivel del mar de hasta 4,5 metros en áreas como Sarasota, St. Petersburg, Fort Myers y Tampa, lo que puso en alerta a millones de residentes. El Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) también informó de lluvias torrenciales que alcanzaron hasta 13 centímetros por hora, lo que ha generado inundaciones repentinas en zonas urbanas, sobre todo en la Bahía de Tampa.
El impacto fue tal que, minutos después de que el huracán tocara tierra, alrededor de 780.000 hogares y negocios quedaron sin electricidad en todo el estado, de acuerdo con la web especializada PowerOutage. En algunas áreas, especialmente en el suroeste de Florida, los cortes de luz afectaron a servicios esenciales, lo que complicó los esfuerzos de las autoridades para brindar ayuda a las personas atrapadas en las zonas más afectadas.
Antes de que Milton llegara a Florida, la situación ya era crítica. Durante las horas previas, se formaron al menos 19 tornados en el centro y sur del estado, lo que dejó a su paso un rastro de destrucción. En el condado de St. Lucie, en la costa este de Florida, un tornado destruyó una comunidad de viviendas para jubilados en el Spanish Lakes Country Club, provocando múltiples muertes, según confirmó el Departamento del Alguacil local. Las autoridades han desplegado equipos de búsqueda y rescate para localizar a sobrevivientes entre los escombros y evaluar los daños.
Además, en varias zonas afectadas, unas 125 viviendas fueron destrozadas, la mayoría de ellas casas móviles que no pudieron resistir la furia de los tornados previos. La Agencia Estatal de Manejo de Emergencias también indicó que los daños materiales son considerables, y los equipos de emergencia aún trabajan para restaurar servicios básicos y atender a los damnificados.
Evacuaciones masivas y refugios
Ante la inminente llegada de Milton, el estado de Florida había ordenado la evacuación obligatoria de más de 5 millones de personas en las zonas más vulnerables, especialmente aquellas ubicadas en la costa y en áreas propensas a inundaciones. A lo largo del estado, se abrieron más de 30.000 refugios para recibir a los evacuados, que buscaban protección frente a los potentes vientos y las lluvias torrenciales del huracán.
En una rueda de prensa ofrecida la noche del miércoles, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, advirtió a la población sobre los peligros inminentes del huracán y solicitó la máxima colaboración de los residentes para que acaten las órdenes de evacuación. «La seguridad de nuestras comunidades es lo más importante. Por favor, sigan las indicaciones de las autoridades locales y manténganse a salvo», señaló DeSantis.
Aunque Milton se debilitó tras tocar tierra, reduciendo su categoría a 2, aún representa una amenaza significativa para las comunidades de Florida. Los vientos continúan siendo fuertes, con ráfagas que alcanzan los 165 kilómetros por hora, y las inundaciones repentinas siguen siendo un riesgo en gran parte del estado. Los condados de Hillsborough, Manatee y Pinellas están bajo advertencia de inundaciones hasta la madrugada, con los equipos de rescate trabajando incansablemente para evacuar a los residentes de las zonas más afectadas.
El Centro Nacional de Huracanes indicó que Milton avanzará hacia el este de Florida a lo largo de la noche, y se espera que salga al Atlántico la mañana del jueves, ya debilitado, aunque con el potencial de seguir causando estragos a su paso. La trayectoria del huracán está siendo monitoreada de cerca por los meteorólogos, que advierten sobre posibles lluvias intensas y ráfagas de viento en la costa este del estado.
Milton es el segundo huracán de gran magnitud en azotar Florida en menos de dos semanas. El pasado 26 de septiembre, el huracán Helene, de categoría 4, impactó la costa noroeste del estado, dejando una estela de destrucción en su camino. Helene causó daños catastróficos en seis estados del sureste de Estados Unidos y provocó la muerte de más de 250 personas. Aún hay comunidades en plena recuperación, y el impacto de Milton supone un golpe adicional para muchas de esas zonas.
La temporada de huracanes en el Atlántico, que comenzó oficialmente el 1 de junio, ha sido particularmente activa este año. Con Milton, ya son nueve los huracanes formados en lo que va de temporada, de los cuales dos alcanzaron la máxima categoría 5, un nivel devastador en la escala Saffir-Simpson.
Los meteorólogos advierten que la temporada de huracanes en el Atlántico, que concluirá el 30 de noviembre, podría registrar más tormentas importantes. La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, en inglés) ha pronosticado que este año se verá una actividad por encima del promedio, con entre 8 y 13 huracanes, de los cuales entre 4 y 7 podrían ser de categoría mayor.
Con el paso de Milton, las autoridades de Florida se centran en evaluar los daños y en las operaciones de búsqueda y rescate. La devastación dejada por el huracán pone en evidencia, una vez más, la vulnerabilidad de las zonas costeras de Estados Unidos frente a estos fenómenos meteorológicos extremos.