Abell 2390
Euclid se ha fijado en el cúmulo de galaxias Abell 2390, que muestra alrededor de 50.000 galaxias cuyas distancias pueden medirse gracias a estas observaciones. Estos cúmulos contienen enormes cantidades de masa, gran parte de ella en forma de materia oscura, una forma de materia que no se puede observar directamente pero que se supone que, junto a la energía oscura, constituye la mayor parte del contenido del universo.
El telescopio utiliza las lentes gravitacionales como técnica fundamental para explorar este universo oscuro. La materia oscura no emite luz pero ejerce atracción gravitatoria y es fundamental para entender la forma en que el universo se agrupa, desde las grandes estructuras de vacíos y supercúmulos de galaxias hasta la Vía Láctea.
Aunque resulta invisible, su presencia distorsiona la luz procedente de galaxias lejanas. Este efecto se denomina «lente gravitacional» y puede ser observado por Euclid, revelando la distribución de la materia oscura a lo largo del universo.